Los vecinos de Rondilla protestan contra “un centro sin servicios”

Las oficinas centrales de la Seguridad Social o el proyecto inicial de la Ciudad de la Justicia son algunos de los ejemplos de la tendencia de trasladar los servicios asentados históricamente en el centro de Valladolid a los barrios periféricos. El último caso, la intención de la Consejería de Empleo de trasladar la oficina del Ecyl situada en la calle cadenas de San Gregorio al barrio de Huerta del Rey.

La Asociación de Vecinos de la Rondilla ya mostró hace semanas su desacuerdo con esta propuesta y este jueves han trasladado su reivindicación a la calle, a las puertas de la citada oficina para reclamar que el centro mantenga sus servicios, “porque a este paso van a tener que comprarnos un coche a cada uno para que podamos hacer cualquier gestión”, ha lamentado la presidenta de la asociación vecinal, Carmen Quintero.

Sobre los motivos planteados por la Consejería para este traslado, indicando que las dependencias no cumplen las mejores condiciones para el servicio, según Quintero “solo son excusas porque esta oficina lleva aquí muchos años y hasta ahora ha sido válida, además esta oficina está en alquiler pero la nueva también, es absurdo porque aquí en la zona hay edificios vacíos y propiedad de la Junta como el Instituto de Santa Teresa, que lo podrían acondicionar y situar ahí la oficina”.

La Asociación de Vecinos de la Rondilla escribió a la Junta solicitando que no se realice el traslado pero no han recibido ningún tipo de respuesta, “por eso también hemos escrito a todos los grupos parlamentarios para que presionen en las Cortes para que este traslado no se realice; porque toda la zona va a quedar afectada, esto influye también al comercio, a los bares que hay cerca”.

Quintero ha asegurado que los trabajadores de la oficina también están en contra del traslado, “muchos de ellos están en la concentración”. En la protesta también han trasladado su apoyo el concejal del PSOE, Luis Vélez, y las representantes municipales de Sí se Puede, Charo Chávez y Gloria Reguero.