La Asociación de Jóvenes Agricultores de Castilla y León (Asaja)pedirá a Milagros Marcos una revisión "total" de las medidas de apoyo al sector agrario en la próxima reunión del Consejo Agrario de Castilla y León que se celebrará el jueves, 13 de julio, después de que la Sociedad Anónima Estatal de Caución Agraria (Saeca) haya denegado el 30 por ciento de solicitudes de avales para préstamos.

Según ha indicado Asaja a través de un comunicado remitido a Europa Press, conseguir el aval de Saeca es requisito "imprescindible" para beneficiarse de la bonificación de intereses, la medida "estrella" puesta en marcha por la Consejera de Agricultura, Milagros Marcos, para afrontar la "catástrofe" agraria en Castilla y León.

La medida de los préstamos, vendida a "bombo y platillo", es, a juicio de Asaja CyL, todo un "fiasco" y una "afrenta" al sector ya que las resoluciones denegatorias no están motivadas por la no viabilidad de las explotaciones, pues su trasfondo es la inexistencia de una partida presupuestaria "suficiente", en los presupuestos del Estado, para cubrir las comisiones y gastos que tiene tarifadas Saeca para estas operaciones.

En este sentido, la organización agraria ha señalado que si el treinta por ciento de las explotaciones profesionales de Castilla y León carecen de viabilidad económica y, por tanto, no pueden asumir un mayor endeudamiento, sería motivo para calificar de "auténtico fracaso" la política agraria de la Junta y del Ministerio de Agricultura.

Los cuatro ejes fundamentales para apoyar al campo en un año como este, según Asaja, han de pasar por una mayor dotación presupuestaria al seguro agrario, préstamos subvencionados accesibles a todos los agricultores profesionales, ayudas directas de mínimas, y pago inmediato de todas las ayudas pendientes.

Ante el fracaso de la Consejería de Agricultura, y ante las dudas de que se pueda producir una rectificación, Asaja también ha hecho un llamamiento a las entidades financieras para que no dejen "tirados en la cuneta" a sus clientes agricultores, y "pacten" con ellos la renegociación de la deuda y nuevas operaciones de crédito a interés preferencial y con al menos dos años de carencia.