Unidos como una piña. Toda la clase política y sindical de León, a la que se ha sumado el obispo de la Diócesis, ha guardado este mediodía un largo silencio en solidaridad y apoyo a las familias de las víctimas de los atentados yihadistas de ayer en Barcelona y de esta madrugada en Cambrils, en Tarragona. La concentración, a la que se han sumado varias decenas de ciudadanos anónimos, también ha sido una demostración serena de repulsa y rechazo al terrorismo, “venga de donde venga”, según indicó el alcalde, Antonio Silván.

La concentración silenciosa ha tenido lugar a las doce del mediodía delante del Ayuntamiento de la capital leonesa. Se han sumado los diputados provinciales y los líderes de UGT, COOO y de todos los partidos políticos con representación provincial.

A la misma hora, en la puerta de la Subdelegación del Gobierno se concentraban los funcionarios y otro gripo importante de ciudadanos como muestra de repulsa a esos atentados.

CASA DE LEÓN EN BARCELONA

En el caso de la concentración en el Ayuntamiento, destacar la presencia del presidente de la Casa de León en Barcelona, Joaquín González, quien está pasando unos días de vacaciones en León. González ha manifestado su sorpresa, consternación, indignación y dolor por el atentado de Barcelona, ocurrido en una zona muy concurrida por los muchos leoneses que componen la Casa de León en Barcelona. González ha asegurado que no tiene conocimiento de que algún leonés residente en Barcelona o alguno de sus familiares hayan sido afectados por estos atentados.

En la mayoría de las ayuntamientos de la provincia se han llevado a cabo concentraciones ciudadanas similares.