El PP ha evidenciado esta mañana su monumental enfado por la decisión del PSOE y Ciudadanos de apoyar en el Congreso de los Diputados una moción de Podemos a favor del gas y de las energías renovables  en contra del carbón, lo que puede adelantar el cierre de las centrales térmicas y, con ello, poner fin a la ya muy reducida minería del carbón en la provincia.

Con caras de gran enfado se presentaron a mediodía ante los periodistas el presidente de la Diputación, Martínez Majo, y los dos vicepresidentes  Ángel Calvo y Francisco Castañón, para descargar toda su artillería política contra el PSOE. “Ataque brutal contra el carbón” o “día triste para León” fueron algunas de las duras frases pronunciadas por los líderes populares, quienes no comprenden la posición del PSOE al apoyar una moción de Podemos, que condena al cierre de las térmicas antes de tiempo y, con ello, el cierre de las últimas minas de carbón nacional.

Aunque la última palabra la tiene el Parlamento Europeo, desde el PP se asegura que, ya por de pronto, esta moción puede provocar que las eléctricas propietarias de las térmicas no lleven a cabo sus inversiones previstas para modernizar las instalaciones por falta de rentabilidad económica. Hasta ahora sólo la térmica de Anllares del Sil tenía un calendario de cierre, pero ahora, de prosperar la moción de Podemos, PSOE y Ciudadanos, todas las térmicas de Castilla y León podrían estar abocadas al cierre. “Es la puntilla al carbón”, concluyó Ángel Calvo, alcalde un ayuntamiento minero y quien bien conoce los pormenores de la minería del carbón.

Majo, Calvo y Castañón reconocieron que el carbón se estaba recuperando de la pésima gestión del ministro del PP, Soria, y que ahora con el nuevo titular de Industria, Nadal, se había reabierto  cierta esperanza para recuperar la minería, pero, ahora con esta moción, apoyada por el PSOE, “se da la puntilla al carbón nacional”.