El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha mostrado su "decepción" por la Declaración Unilateral de Independencia (DUI) de Cataluña escenificada este viernes en el Parlament en su visita al Ayuntamiento de Zamora esta tarde. Una visita que se realizaba en una tarde "de malas noticias" en la que el coordinador federal calificó la declaración unilateral de Independencia de una "provocación que carece de valor jurídico" y que solo "agravará la crisis social y política".

Un hecho acaecido que Garzón tilda como consecuencia de "la mala política de Rajoy y la irresponsabilidad del Govern" que "nos han llevado a una situación incierta" en la que los responsables han metido a la población en un escenario "del que no saben salir". Además, a la situación calificada por el coordinador federal de Izquierda Unida de "irresponsabilidad política" también se le suma la crítica al artículo 155, que según Garzón, "tampoco soluciona el problema", por lo que IU lo único que busca es "una reestructuración que lleve al país a constituir la tercera República Federal".

En cuanto a su sintonía con Podemos en torno al proceso de independencia, Alberto Garzón ha destacado que son "partidos distintos" pero que comparten el proyecto de un país con una "España federal, unida, plurinacional". Y es que, ambas formaciones defienden "un proceso reconstituyente tras la caída de caretas en el Gobierno de Rajoy".

"Rajoy dice que actúa en nombre de la ley cuando dirige uno de los Gobiernos más corruptos de la Unión Europa, el gobierno que no ha hecho nada cuando se incumplían los artículos de la Constitución que se referían al derecho a la vivienda, al derecho al trabajo y a la seguridad social. Por lo tanto, defendemos que nuestro país necesita una salida en positido defendiendo que Catauña siga en España", subrayaba.

Asimismo, el coordinador federal de IU también ha hecho un llamamiento a la calma, la tranquilidad y el sentido común en un tiempo en el que esto no se escucha. Además, recriminaba el lenguaje "bélico" utilizado durante este proceso por el Partido Popular, PSOE y los independentistas y apelaba al diálogo y la mediación como "único camino". Por último, Garzón exponía con esperanza que "en poco tiempo puede que podamos construir un país en el que merezca la pena vivir, con derechos sociales y con el problema territorial de Cataluña resuelto", finalizaba.