Herrera apela a la verdad, la credibilidad y la profesionalidad periodística
Durante el acto de entrega de la XXXII edición de los Premios Francisco de Cossío, celebrado esta tarde en Valladolid, el presidente de la Junta de Castilla y León ha hecho referencia a los retos a los que se enfrenta el periodismo en la actualidad, entre los que ha destacado las nuevas realidades y herramientas que proporcionan el avance de las tecnologías de la comunicación y las redes sociales. Ante todo ello, el presidente de la Junta ha señalado que hace falta más profesionalidad, preparación, esfuerzo y autoexigencia que nunca, con el objetivo de que los periodistas puedan marcar diferencias, en términos de calidad y crédito. En este sentido, se ha referido al mal uso que también puede hacerse de estas nuevas tecnologías de la comunicación, lo que ha llevado a que en la actualidad hablemos tanto de posverdad, que en el fondo no es otra cosa que una forma más de manipulación. Algo que coincide con las conclusiones de un informe, encargado por el Consejo de Europa, que alerta sobre el «trastorno de la información», un término que se refiere a la amenaza que supone para las sociedades democráticas la proliferación de bulos y falsedades y las campañas de desinformación, capaces de vender utopías imposibles o de llevarse por delante valores como el prestigio, la estabilidad y la confianza personal y social.
Así, el presidente ha hecho hincapié en que la verdad, la credibilidad y la profesionalidad son los verdaderos valores “del buen periodismo de ayer, de hoy, y de siempre”, pero que hoy, más que nunca deberían ir acompañados de la necesaria dignidad de los profesionales, cuyas condiciones laborales y retributivas constituyen una garantía para su independencia y búsqueda de la verdad.
Los Premios Francisco de Cossío reconocen cada año a los mejores ejemplos de ese buen hacer periodístico y de esa búsqueda de la verdad. Este año, el Premio Francisco de Cossío 2017, en su modalidad de Prensa, ha recaído en Irene Gómez, de La Opinión-El Correo de Zamora, por su trabajo titulado 'El primer caso de pederastia en la Iglesia de Castilla y León condenado por la Santa Sede'. Según ha destacado el presidente, se trata de un conjunto de artículos que dan luz a una verdad que es imprescindible contar y conocer.
El Premio Cossío de Radio ha sido otorgado a Laura Alonso, de Radio Nacional, por su trabajo sobre los '20 años de la liberación de Ortega Lara'. Este relato ofrece testimonios inéditos sobre una cruel acción terrorista que conmocionó a España entera. En este punto, el presidente ha señalado que Castilla y León acaba de dotarse de una Ley de Víctimas, entre otros fines para proteger su memoria y dignidad.
Por su parte, Juan Manuel García, de Castilla y León Televisión ha recibido el Premio Cossío de Televisión por su trabajo 'Víctor Barrio. Puerta grande del toreo'. El reportaje acerca al gran público la figura humana y profesional del torero segoviano fallecido, que fue Premio de Tauromaquia de Castilla y León 2016.
El Premio Cossío de Fotografía ha sido otorgado a Gabriel Villamil, de El Norte de Castilla, por su serie fotográfica 'Castilla y León en llamas', en la que se refleja en toda su impactante crudeza el desastre y la desolación provocados por el fuego, en este caso en La Cabrera leonesa, lo que recuerda el esfuerzo que es necesario hacer tanto en la concienciación social como en la mejora de los dispositivos humanos y técnicos para luchar contra este drama.
El presidente de la Junta también ha destacado la mención especial a Lucía Rodil, Francisco Gómez, José María Valdivielso y Sandra Vasallo por su 'Informe Manu', reportaje centrado en las distorsiones que existen en el acceso a la Universidad en función de la Comunidad donde se realicen las pruebas, lo que acredita la necesidad de una prueba única y simultánea para todo el territorio nacional. Así como la mención especial en fotografía para Fernando Blanco, por una impactante instantánea publicada en ABC.
Por último, Juan Vicente Herrera ha entregado el Premio Cossío a toda una Trayectoria Profesional a Alfredo Matesanz, un narrador y testigo de los más importantes acontecimientos vividos en la Segovia contemporánea, ciudad de la que es Hijo Predilecto. También ha sido durante 14 años presidente de la Asociación de la Prensa segoviana. De él, el presidente ha afirmado que ejemplifica ese ideal del periodismo de raza, noble, de calidad y de proximidad, “que desde sus raíces en el territorio se erige como espejo para los profesionales del futuro”.