El Real Valladolid recibió un duro varapalo (2-3) ante el Numancia y se fue de vacío en un partido que los de Luis César encarrilaron en la primera mitad gracias a un doblete de Mata. Tras las reanudación, el Numancia acortó distancias y, ya con diez por la expulsión de Kiko Olivas en el minuto 64, el Pucela vio cómo los sorianos remontaban con dos goles nacidos en sendos saques de esquina.

Lo cierto es que la primera parte del Real Valladolid fue buena e, incluso, el 2-0 se quedó corto para los méritos contraídos. Los blanquivioleta presentaron un 4-3-3 con Guitián, Anuar y Cotán en el centro del campo, algo que dio fortaleza defensiva y permitió recuperar la alegría ofensiva. Mata, en dos ocasiones, fusiló a Aitor Fernández e hizo pensar en una victoria plácida.

Pero en la segunda mitad todo cambió. Hasta el gol de Nacho el guión era el mismo que el de la primera parte, pero se juntó el acierto del soriano con la expulsión de Kiko Olivas en apenas cinco minutos. El Pucela tuvo que replegarse para defenderse y el Numancia se aprovechó de dos jugadas nacidas en la esquina para completar la remontada por mediación de Carlos Gutiérrez y Guillermo.

La dura derrota mantiene al Pucela con 23 puntos. El objetivo ahora es levantarse y conseguir el triunfo el próximo fin de semana en Albacete.