La Diputación aprueba un presupuesto con deuda cero para 2018
El pleno de la Diputación de Salamanca ha aprobado este viernes en sesión extraordinaria el presupuesto de la institución provincial para 2018, que asciende a un total de 104,6 millones de euros y representa un incremento del 2,6% con respecto al ejercicio anterior. Saldrá adelante con la mayoría que ostenta el Partido Popular en la Corporación, pues el resto de partidos políticos, en minoría, se oponen a estas cuentas.
El presidente de la Diputación, Javier Iglesias, calificó días atrás este presupuesto de “histórico porque es el primero sin gasto financiero, con deuda cero”, al tiempo que recordó que en los últimos seis años se amortizaron más de 71 millones de euros de deuda. Para el presidente de la Diputación son “los presupuestos que necesita la provincia, comprometidos con la creación de oportunidades en los municipios, pues como así se reconoce, somos la institución que mejor defiende los intereses de las zonas rurales de la provincia”. Asimismo, valoró que se han alcanzado cifras muy importantes en transferencias a los ayuntamientos, con fondos propios, a la vez que se refuerzan, una vez más, las políticas sociales.
En su presentación este viernes, la delegada del área de Economía y Hacienda, Chabela de la Torre ha lamentado el "catastrofismo" de la oposición con "el mejor presupuesto que ha presentado la Diputación en los últimos años". Asimismo, ante las críticas del resto de grupos por la "falta de tiempo" para analizar la propuesta antes de llevar el documento a pleno, De la Torre ha insistido en que el equipo de Gobierno ha guardado "escrupulosamente las formas" para que pudiesen conocer y trabajar sobre ello.
El presupuesto, en datos
En este sentido, indicó que la amortización total de la deuda ha provocado una reducción del gasto del área de Economía y Hacienda de 3,2 millones de euros, que ahora se destinarán a incrementar los planes de apoyo y provinciales. Así, citó el incremento de 2 millones de euros del programa bienal de Planes Provinciales, que está dotado con 10 millones de euros cada anualidad, y el Plan de Apoyo Municipal, con otros 2 millones de euros más que en presupuesto anterior. Se trata de las dos principales herramientas con las que cuentan los ayuntamientos de la provincia para llevar a cabo algunas de sus obras más importantes.
El área de Fomento y Bienestar Social son las más potentes del presupuesto al congregar un 33,38% (34,9 millones) y un 29,06% (30,4), respectivamente, del total del mismo. Gracias a este incremento, se pueden mantener todas las actuaciones de protección social e incrementar los recursos para prestaciones fundamentales como el Servicio de Teleasistencia, con un incremento de casi el doble, 403.104 euros; la Ayuda a Domicilio, que llega hasta los 7,3 millones de euros (142.000 euros más, -después de aumentar también esta partida 1,5 millones más el pasado año-); se consolidan los convenios con el Tercer Sector, con una aportación por parte de la institución provincial de 395.000 euros; y se refuerza el apoyo a la juventud con nuevas líneas y programas que suponen un incremento del presupuesto de un 39%, hasta alcanzar los 245.000 euros.
En Formación y Empleo, uno de los ejes estratégicos de la Diputación de Salamanca, se destinarán un total de 6,2 millones de euros. Así, destacan iniciativas formativas como el programa Forma-T Joven de garantía juvenil (519.411 euros); 4 Acciones de Formación para el Empleo (651.000 euros). También, en el apartado de empleo serán 4 millones de euros los que se destinarán a la contratación de desempleados por parte de los Ayuntamientos dentro del Plan de Apoyo Municipal; y se ha asignado un total de 614.917 euros a la Estrategia de Empleo, que ha ayudado durante estos últimos años a autónomos y pequeñas empresas de la provincia. En este sentido, Javier Iglesias avanzó que la Diputación de Salamanca volverá a convocar una nueva Estrategia de Empleo para este nuevo ejercicio dotada con 2 millones de euros.
Cultura es otra de las áreas que ha experimentado un mayor incremento, al pasar de los 6,6 millones de euros en 2017 a los 7,3 millones de euros del próximo año. En esta partida se incluye la adquisición de un nuevo Bibliobús (250.000 euros), para dar un mejor servicio a la provincia y el apoyo a la celebración del año Jubilar Teresiano con 70.000 euros. En Turismo, el presupuesto contempla una partida de 935.000 euros en políticas y actuaciones turísticas, que incluye el Plan Estratégico con 660.000 euros.
En materia de medioambiente, el presidente subrayó que cada año toma más protagonismo en la gestión de la Diputación y así anunció la puesta en marcha de un Plan de Depuración de Aguas Residuales en los municipios por importe de 200.000 euros, así como una ayuda de 2,5 millones de euros durante los próximos cinco años para la gestión de escombreras en la provincia, servicios demandados por los alcaldes. También se continuará con el Programa de Optimización Energética con 700.000€ y la limpieza de cauces con 120.000 euros.
Finalmente, se continúa con la apuesta por el sector primario y la investigación con 930.000 euros para las ferias agrícolas y ganaderas que organiza la Diputación y se destinarán 600.000 euros a investigación, convenios agrarios y apoyo a cooperativas y asociaciones.
El PSOE reclama más dinero para inversiones
El Grupo Socialista en la Diputación de Salamanca ha mostrado su oposición al presupuesto provincial para 2018. Su portavoz, Carmen García, considera que es “un presupuesto maquillado con Photoshop”, pues se repiten partidas un año tras otro. Pero ahora hay un cambio importante, que ya no se pagará dinero por la deuda de la Diputación y, sin embargo, para el PSOE este ahorro no se está repercutiendo en más inversiones para proyectos en los pueblos.
Los socialistas reclaman un plan provincial de fomento del empleo juvenil, además de hacer que internet llegue a todos los rincones del mundo rural y que se acometa un plan de renovación de redes de agua.
Ciudadanos pide unos presupuestos que creen empleo y fijen población
Ciudadanos denuncia que el equipo de gobierno del PP en la Diputación de Salamanca “constata la intención de seguir en la parálisis de una administración que va a tener que enfrentarse a grandes desafíos y retos en los próximos años para que esta ser útil y eficiente para los municipios de la provincia”.
“Los pueblos y municipios de Salamanca ven como cada año quedan en el olvido sin que nadie de una voz de alarma”, ha señalado Manuel Hernández. Así, atribuye a la “falta de planificación, de la que este grupo ha hecho mención a lo largo de esta legislatura” como resultado a otros presupuestos realizados sin reflexionar.
Hernández ha recordado al Partido Popular que “la provincia sigue cambiando, sin embargo este presupuesto carece de políticas de verdadera utilidad para la Provincia y las necesidades que tiene”. Ciudadanos ha vuelto a lamentar que tan solo dos de cada diez euros que gasta la Diputación sea en los municipios de la provincia.
El portavoz de Ciudadanos ha valorado que pasado dos tercios de la legislatura, mientras que “la dejadez y el pasotismo hacen que estemos en el mismo lugar del inicio. Quizá porque el equipo de gobierno no está preparado para avanzar, está anquilosado en viejas e ineficaces políticas”. En resumen, para Ciudadanos estos presupuestos “son un reflejo de un equipo de gobierno vacío de ideas, sin proyecto, sin políticas y lo peor de todo, sin ilusión por cambiar nada”.
Ganemos presenta un presupuesto alternativo
Finalmente, el diputado provincial de Ganemos, Gabriel de la Mora, propone medidas de racionalización del gasto público que pretende realizar ahorros por valor de varios millones de euros, destinados a financiar nuevas políticas y a dotar mejor políticas ya existentes, entorno a los ejes políticos de la agrupación: transparencia, participación, equidad entre los municipios, lucha contra la desigualdad y el despilfarro, invertir en derechos sociales, apostar por el conocimiento y avanzar hacia la transición ecológica.
Entre las propuestas más significativas se encuentra suprimir las subvenciones directas entregadas por el gobierno provincial ‘a dedo’, un millón de euros anuales, e integrar el Plan de Apoyo Municipal en los Planes provinciales, y crear un nuevo plan de inversión municipal participativo (dos millones de euros) cuyas prioridades de gasto fueran decididas por los propios ayuntamientos, “a modo de presupuestos participativos”, explicó el diputado.
Otra de las propuestas estrella tendría como fin mejorar el empleo, el acceso a la vivienda y contribuir a la fijación de población en los pueblos, a través de un ambicioso plan de rehabilitación de vivienda rural (1,5 millones de euros). Esta nueva política contaría con dos líneas: la primera de ellas destinada a fomentar la adquisición, rehabilitación y el alquiler de viviendas para residencia habitual en municipios de nuestra provincia de población inferior a 5.000 habitantes, priorizando a las familias con menor renta y mayor número de miembros; la segunda línea, estaría destinada a municipios y tendría como fin la rehabilitación de viviendas de titularidad municipal destinadas a alquiler social, de forma similar al programa ‘Rehabitare’ de la Junta de Castilla y León, con la cual se debería colaborar en esta materia.