CCOO y la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) han condenado la intención de Bimbo de "precarizar todavía más" las condiciones laborales de un total de 800 autónomos y de anular complementos y mejoras de todo el colectivo, según ha indicado el sindicato a través de un comunicado remitido a Europa Press.

En los próximos días pondrán el caso en conocimiento de la Inspección de Trabajo y denunciarán a la empresa por prácticas antisindicales, además de acusarla de intimidar a sus trabajadores autónomos y económicamente dependientes (TRADES) con perder el empleo si no se adhieren al perjudicial acuerdo que ha suscrito con la representación sindical de Donuts.

Este acuerdo, según CCOO, reduce condiciones laborales, recorta salarios y pone en riesgo su salud, pues pretende que trabajen 60 horas semanales, una jornada laboral que la empresa define como "razonable".

Lo que ocurre en Bimbo es consecuencia de lo que se sucedió en el año 2011, cuando la empresa cambió mediante un ERE su red comercial. Obligó a los trabajadores y trabajadoras a suscribir un contrato mercantil y utilizó la figura del TRADE para legalizar su situación. Tuvieron que acogerse a un acuerdo de interés profesional que todavía está vigente y que Bimbo ignora. Transformó los vendedores y vendedoras con relación laboral en autónomos económicamente dependientes que ejercían su actividad con cierta autonomía y capacidad organizativa, ha recordado la organización sindical.

Tras comprar Panrico (ahora Donuts) en 2016, Bimbo inició la integración de las dos empresas y la negociación de un nuevo acuerdo de interés profesional para regular las condiciones laborales de todo el personal autónomo. El 14 de diciembre l marca de bollería alcanzó un acuerdo con los representantes de los TRADES de Donuts (ATA y UGT-Donuts) que no fue suscrito por CCOO y UGT Bimbo por precarizar las condiciones laborales y vulnerar derechos.

Desde entonces, ha lamentado CCOO,Bimbo "amedrenta" a los TRADE y les "amenaza" con perder su empleo si el 8 de enero no se adhieren a un acuerdo que es "tremendamente lesivo" para sus intereses.