Empresas de internet y telefonía demandan alumnos mejor formados
El sector de las nuevas tecnologías no sólo está asociado a ordenadores e inteligencia artificial. Hay todo un entramado en la provincia de Salamanca en torno a la instalación de internet y telefonía en negocios y hogares, aproximadamente medio centenar de empresas con unos trescientos trabajadores, más los autónomos que también hay. Un sector que se encuentra entre la espera y la iniciativa.
Según explica Antonio Mateos, gerente de AM-TEL & TIC’s, empresa referencia en el sector, perteneciente a la Confederación Empresarios de Salamanca (CES), la espera hacia los acontecimientos de desarrollo tecnológico que se producen cada semana y que el usuario demanda, y la iniciativa para mostrarles las novedades del mercado a un segmento de población poco asociado con las nuevas tecnologías, sobre todo en una provincia tan rural y envejecida como Salamanca. “Es un feedback constante, o nos movemos o desgraciadamente hay poco iniciativa y es necesario diversificar la actividad, con lo que se nos requiere una cantidad de información y retroalimentación que además es diaria”.
La crisis fue como una continua sacudida de varazos a un árbol en el que las empresas que se anclaron en la simple instalación de antenas y telefonía se están quedando en el camino, madurando antes de tiempo y quedando fuera del mercado. Otras, al tener que reducir plantilla, se transformaron en autónomos junto con los servicios de electricidad, generándose una competencia desigual en el tejido productivo charro.
El mayor problema en el día a día de estas empresas es el cobro, pues el 80% de los trabajos son subcontratados, con pagarés a sesenta días con vencimiento a los ciento cincuenta, lo que dificulta el funcionamiento diarios de los pequeños negocios. Eso conlleva a que incluso se rechacen grandes trabajos por miedo a quedar empantanados financieramente, pues además los bancos no conceden créditos fácilmente.
Las principales zonas de trabajo se concentran en la capital, su alfoz y cabeceras de comarca. Según explica Antonio Mateos, no se busca una cobertura territorial, sino poblacional, teniendo en cuenta que Salamanca posee medio millar de núcleos de poca densidad de habitantes. Así, el 70% de la población está en el 30% del territorio, con servicios de 4G y fibra óptica suficiente para usuarios y empresas, pero el 30% de la población repartida por el 70% del territorio restante tiene grandes carencias, incluso hay zonas donde no se ven canales de Televisión Digital Terrestre como Real Madrid y 13TV.
Y es que el año pasado dejó de funcionar Iberbanda para los pequeños núcleos, regresando a la tecnología 3G. Mateos considera que estos problemas se pueden solucionar con los satélites, pero en puntos fijos, porque para la cobertura en movilidad es más complicado. De ahí que se esté a la espera de la tecnología 5G, “a ver si se hace con mejores perspectivas, no deprisa y corriendo como el 4G, que haya un margen de tiempo para fabricar, adaptar y ver diferentes opciones en beneficio del consumidor. Hay que preparar las autopistas para que estos coches puedan circular”.
Escasa formación de los alumnos
El gerente de AM-TEL reclama una formación de mayor calidad en los alumnos para afrontar las actualizaciones diarias de los empleados. “Tenemos que buscarla nosotros con los fabricantes, con el coste que ello conlleva de formar buenos empleados que después se vayan a la competencia, o monten su negocio, porque no hay una ley que nos ampare, como en otros países”.
Y añade: “La Formación Profesional es nuestra cantera natural, pero muy desgraciadamente no da nivel a los estudiantes para empezar en las empresas”, a lo que se une “un nulo componente social, les tenemos que enseñar nosotros el trato con el cliente. Vienen muy poco preparados”.