Consideran que el caso de Gabriel avala la prisión permanente revisable

Responsables políticos de VOX, Partido Popular y Ciudadanos han coincidido hoy en su defensa de la aplicación de la figura de la prisión permanente revisable instaurada en 2015 a raíz de la última reforma del Código Penal aplicado por los 'populares', planteamiento que las tres formaciones apuntan que viene avalado ante casos como el del niño Gabriel Cruz, presuntamente asesinado por Ana Julia Quezada, compañera sentimental de su padre biológico.

Así se han expresado, durante una mesa redonda al respecto organizada por el Grupo de Investigación 'Derecho de las Nuevas tecnologías y delincuencia informática' de la Universidad de Valladolid, celebrada en el Aula Mergelina de la UVA, el secretario general de VOX, Javier Ortega; el senador del PP palentino y exdirector de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó, y Miguel Fernández Benavides, del Gabinete Técnico del Grupo de Cs en el Congreso.

El político 'popular', en declaraciones a Europa Press, ha justificado la idoneidad de esta medida desde un punto de vista "constitucional, a través de una pena acorde con el principio constitucional de la reinserción del penado; moral, a fin de dar respuesta a víctimas de crímenes abominables, y político, para garantizar la seguridad de los ciudadanos".

Precisamente, con respecto a la detención de Ana Julia Quezada como presunta responsable de la muerte de Gabriel Cruz, el senador del PP precisa que el asesinato de niños es uno de los casos de aplicación de esta polémica pena que cuenta con la frontal oposición del PSOE y de Podemos, a los que recuerda que todos los países de la UE, excepto Portugal, la contemplan.

"Estamos pendientes de una sentencia del Constitucional para que avale esta medida, pero le digo al PSOE que su interés por que se derogue, antes incluso de ese fallo, es porque sabe perfectamente que la reforma saldrá refrendada", ha apuntado Cosidó, quien añade que desde su puesta en marcha tan sólo se ha aplicado una vez, en el caso del padre que asesinó a sus hijos con una sierra, de ahí que, como así añade, "el éxito de esta medida será mayor cuanto menos se utilice, pues ello supondrá que la sociedad española es mejor".

Las víctimas, por encima de los penados

En la misma línea, el secretario general de VOX, Javier Ortega, se ha mostrado un ferviente partidario de la prisión permanente revisable para "garantizar la seguridad de los españoles y acorde con la realidad del resto de países de la Unión Europea, que tienen medidas similares o, sin eufemismos, la cadena perpetua o la prisión permanente no revisable", y todo ello para prevenir casos entre los que ha citado el del 'violador del ascensor', Pedro Luis Gallego, que reincidió tras recuperar su libertad.

En cualquier caso, el representante de VOX mantiene que como primera norma es crucial el "cumplimiento íntegro de las penas para salvaguardar la seguridad y el derecho a la vida de los ciudadanos", pues, como así insiste, "primero están las víctimas, sus derechos, y luego los de los condenados".

Ortega discrepa también de aquellos que piden no legislar en caliente, al hilo de casos como el de Almería. "El problema es que algunos no legislan en caliente, ni en templado, ni en frío o nunca y cuando lo hacen es pensando únicamente en los delincuentes, nunca en las víctimas".

La prisión permanente revisable será objeto este miércoles de un debate parlamentario en el Congreso donde se debatirá una enmienda a la totalidad de Cs que, como así explica Miguel Fernández Benavides, defiende un endurecimiento a la hora de que los penados accedan al tercer grado o a los permisos.

"Con la actual regulación del PP, un criminal condenado a prisión permanente revisable puede acceder al tercer grado en quince años y en ocho a los permisos. Lo que proponemos nosotros es endurecer los plazos para el acceso a esos beneficios", ha resumido el representante de Cs, quien ha echado también en cara al Partido Popular por haber instaurado esta medida en 2015 "en solitario, en caliente" y por ello aboga por esperar a la resolución del Constitucional en lugar de derogarla "en caliente también".