El Ayuntamiento proyecta una gran infraestructura turística en San Vicente
El Plan Director del Cerro de San Vicente impulsará la protección y puesta en valor de este emplazamiento, donde se conservan los restos arqueológicos de la aldea originaria de la ciudad de Salamanca que se desarrolló entre los siglos VII y IV antes de Cristo.
El concejal de Patrimonio en el Ayuntamiento de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha explicado que se trata de un marco estratégico que permitirá establecer futuras actuaciones en este parque arqueológico con el fin de mantener un equilibrio adecuado entre la conservación del yacimiento y su uso por parte de los ciudadanos.
El plan, consensuado con la Junta de Castilla y León, y que cuenta con la autorización y el visto bueno de la Comisión de Patrimonio Cultural, tiene el objetivo de compatibilizar la función arqueológica del Cerro de San Vicente con la de parque urbano, espacio cultural y mirador de la ciudad. En este sentido, García Carbayo ha destacado que su finalidad es convertir este lugar en un espacio vivo en el que convivan los trabajos arqueológicos, las visitas de salmantinos y turistas y en el que se potencie su dimensión sociocultural.
El Plan Director del Cerro de San Vicente propone continuar con las excavaciones arqueológicas en la plataforma superior, en colaboración con la Universidad de Salamanca, e iniciar excavaciones arqueológicas en la zona donde se ubican los cimientos del antiguo colegio Hispanoamericano, donde se construirá una estructura que proteja los nuevos hallazgos de las condiciones climatológicas adversas y que permita la visión de los mismos a través de una serie de pasarelas, al igual que sucede ya con los restos arqueológicos protohistóricos originales.
La zona más próxima a la entrada, en la que recientemente fueron descubiertos restos de las fortificaciones y baterías francesas de la Guerra de la Independencia, será señalizada y dispondrá de cartelería informativa, continuando en el futuro las excavaciones, que también se ejecutarán en la zona donde su ubica la antigua casa de recreo benedictina.
Por otro lado, para potenciar su función de parque urbano, el documento incluye la creación en el interior de una pequeña plaza desde la que se accederá a unos senderos en rampa sobre la ladera, con áreas estanciales para disfrutar de las vistas y del descanso, que comuniquen con la plataforma superior. A lo largo de estos senderos se colocarán bancos y se plantarán nuevos árboles. En la zona más próxima al Puentecillo de la Alberca, el plan prevé también la existencia de pequeños huertos urbanos.
Asimismo, este marco estratégico de actuaciones en el Cerro de San Vicente propone la continuación de algunos trabajos arqueológicos en la ladera como son la delimitación de los muros de contención de los bancales, la limpieza e investigación de la pila cuadrada situada en la zona baja o la limpieza y delimitación de la noria que también aparece en esta zona.
Por último, el Cerro de San Vicente potenciará en el futuro su uso como espacio cultural.
En este sentido, se ampliará el contenido expositivo del Museo con otra exposición que versará sobre la “Salamanca desaparecida” (los edificios históricos de la ciudad de Salamanca que se perdieron a lo largo de los siglos) y la Guerra de la Independencia. El Ayuntamiento de Salamanca colaborará con la Universidad para la definición de estos contenidos.
El Plan propone la construcción de un espacio sociocultural en la plataforma superior que pueda acoger distintos eventos culturales y futuras exposiciones, además de servir de mirador, sumándose a los tres actualmente existentes: uno al Paseo de San Vicente, otro al teso de las Catedrales y el tercero a la Ruta de la Plata.
Finalmente, el plan también impulsará la consolidación de la muralla medieval y la mejora de los accesos, proponiendo un nuevo acceso a través del Portillo de San Vicente y dotar de una escalera al Puentecillo de La Alberca.
Todas estas intervenciones se suman a otras anteriores que ya ha acometido el Ayuntamiento de Salamanca, en colaboración con otras administraciones, para hacer visitable este espacio patrimonial e incorporarlo a la oferta turística de la ciudad.
El Ayuntamiento está firmemente comprometido con la protección y puesta en valor del patrimonio histórico como ratifican las intervenciones en la Torre de las Campanas de la Catedral, en las Torres de la Clerecía, en el puente Enrique Estevan, en la Casa Lis o el acondicionamiento de la muralla romana y sus entornos.
Asimismo, el compromiso del Consistorio se refleja en otras iniciativas como la restauración de la Iglesia de San Polo, las intervenciones en la Calzada Romana, la adquisición del tramo de la muralla prerromana en la Cuesta de Carvajal, el proyecto de rehabilitación de la Torre de los Anaya o la restauración del Palacio de Monterrey.