Tambores destemplados anuncian ‘Las Siete Palabras’
Un año después de cumplir su medio siglo, la Hermandad Penitencial de las Siete Palabras ha vuelto a salir de su templo de origen retornando la vista atrás hacia las vivencias y logros conseguidos, en una noche templada que ha animado a salir a zamoranos y visitantes.
Tras la celebración de la Eucaristía a las 22:45 horas en Santa María de la Horta, los más de 1.600 cofrades han recorrido las oscuras y angostas calles del casco histórico acompañando a la imagen del Cristo de la Agonía, talla anónima de tamaño natural en madera de pino del siglo XVII, que es llevado a hombros en unas sencillas andas por los hermanos de Las Siete Palabras.
Durante este desfile procesional, los hermanos portan siete pequeños crucifijos con siete estandartes con las últimas palabras que pronunció Jesús en la Cruz. Son obra de prestigiosos autores, como Juan de Avalos, Coomonte, Ricardo Flecha y Fernando Mayoral.
Al ritmo acompasado de tambores destemplados, la comitiva se ha dirigido por calle Horta, Caldereros, calle la Plata, cuesta de Balborraz, plaza Mayor (por Ayuntamiento viejo) calle Ramos Carrión y plaza de Viriato donde se efectua el rezo de las Siete Palabras.
El desfile continúa por Rúa de los Francos, calle Pizarro, cuesta de Pizarro, avenida de Vigo, calle Puente, plaza de Santa Lucía, Zapatería, Caldereros y calle Horta para retornar al templo de salida.
Las Siete Palabras conserva el carácter innovador y joven que llevó a su fundación allá por el año 1967 de la mano de un grupo de estudiantes, envuelta en una fuerte polémica, ya que en sus primeros estatutos contemplaban preferencia por los jóvenes, menores de 30 años, y por la incorporación de las mujeres. Esta noche, sus túnicas de estameña blanca, con faja y caperuz de pana verde musgo escriben un año más en su historia a la luz de sus cirios verdes.