El excondejal de Urbanismo entre 1999 y 2003 Federico Sumillera ha comparecido este jueves en la comisión de investigación sobre la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV) que trata de esclarecer lo ocurrido en el fallido proyecto del soterramiento y las responsabilidades políticas derivadas del mismo. Según la portavoz de Toma la Palabra, María Sánchez, Sumillera ha asegurado que durante sus años al frente de Urbanismo “no tuvo participación en el proyecto, porque se llevaba todo desde la Alcaldía”, ocupada entonces por el popular Francisco Javier León de la Riva.

Según ha explicado Sánchez tras la comisión, Sumillera ha reconocido sentirse “sorprendido” por la deuda de 400 millones de euros que llegó a tener la SVAV “sin que hubiera nada construido”.

Federico Sumillera también ha corroborado el testimonio de comparecientes anteriores sobre el asesor ferroviario de León de la Riva, Carlos Baró, “porque nos ha asegurado que nunca vieron ningún informe que realizara sobre el trabajo que hacía”.

Ausencias

En la comisión no han comparecido tres de los cinco citados para esta sesión, De la Riva, y los exconcejales Manuel Sánchez y José Antonio García de Coca. Sí que ha acudido el portavoz del PP en el Ayuntamiento, Jesús Enríquez, que ha confirmado “que el máximo responsable del proyecto del soterramiento era Francisco Javier León de la Riva”, tal y como ha explicado tras la sesión la presidenta de la comisión, Charo Chávez.

Sobre la ausencia de León de la Riva, Chávez ha afirmado que “no ha excusado los motivos por los que no comparecía” y ha recordado que en la comisión habrá un segundo periodo para solicitar comparecencias “y se podrá volver a pedir que asista alguien que no haya venido en su primera citación”, por lo que ha dejado la puerta abierta a que alguno de los grupos vuelva a requerir la comparecencia de León de la Riva.

Pilar Vicente, portavoz de Ciudadanos, ha calificado de “falta total de respeto a los vallisoletanos” que León de la Riva, no haya comparecido y ha incidido en que De la Riva es “la persona que durante 20 años ha tenido la máxima responsabilidad en este Ayuntamiento y en la operación ferroviaria”, y por eso ha precisado que “seguiremos insistiendo para que De la Riva dé la cara en esta comisión tras el juicio, si esa ha sido la verdadera razón para no asistir”.

Información sobre los avales

Por su parte, el portavoz del PSOE, Pedro Herrero, ha señalado que Enríquez ha comparecido “en actitud desafiante” y ha que asegurado que “acudir a la comisión es más que una obligación, por lo que deja en mal lugar a León de la Riva que no ha venido”.

Incidiendo en la importancia que tenía el exalcalde en el proyecto del soterramiento, “si tan claro está que era el responsable para lo bueno, también tiene que serlo para lo malo y para asumir el fracaso del proyecto”, ha añadido Herrero.

Herrero ha incidido también en la contradicción de Enríquez “sobre un acta de febrero de 2011, dos semanas después del requerimiento de los avales, cuando Enríquez se dirigió al PSOE exigiendo que el Ministerio aportara los 100 millones que le correspondían, eso es algo que contradice lo que siempre ha mantenido Enríquez de que desconocía las confort letter firmadas por León de la Riva, que son un aval en este caso”.

Responsabilidad del PSOE

Por su parte, Jesús Enríquez, ha defendido que el Gobierno del PSOE "provocó un gran retraso de tres años" en la tramitación del proyecto ferroviario al obligar a modificar el trazado de la variante este, con lo que "entró de lleno en la crisis".

A lo largo de su intervención de unas dos horas de duración, de las más extensas que se han producido en esta Comisión de Investigación, Enríquez ha querido transmitir la idea de que el retraso motivado por los informes de impacto ambiental en 2005 que llevaron al Ministerio de Fomento a plantear la modificación del trazado de la variante este de mercancías fueron la principal causa del fracaso de la operación.

Enríquez ha citado una intervención del exsecretario de Estado de Infraestructuras Víctor Morlán a finales de 2004, meses después de la entrada del PSOE en el Gobierno de España, en la que explicó que la alta velocidad a Valladolid estaba ya con las obras avanzadas y que la variante Este estaba pendiente del informe de impacto ambiental.

Ese informe, requerido en 2005 por el Ministerio de Medio Ambiente, motivó el cambio en el proyecto por parte de Fomento, lo que según Enríquez derivó en un "retraso de tres años" que "condujo al proyecto a la crisis", pues ha recordado que, "como ha reconocido el exministro Pedro Solbes", la recesión económica comenzó en 2008.