Hoy no es un día cualquiera. Hoy es 20 de abril. Y eso en Valladolid tiene una connotación musical palmaria gracias a la canción de los Celtas Cortos, un grupo que desde hace décadas ha trascendido a la identidad de la ciudad. Desde este viernes de una manera aún más imborrable, con su reflejo en el callejero de la ciudad, en el barrio de Las Delicias.

Más de un centenar de vecinos han asistido esta tarde a la inauguración de la calle que une la avenida Segovia con el paseo Juan Carlos I y que desde ahora lleva el nombre del célebre grupo vallisoletano. “Celtas Cortos no es esta calle, Celtas Cortos es la calle, el espíritu de la ciudadanía y de compartir la vida en la calle”, ha asegurado un emocionado Jesús Cifuentes durante la inauguración.

“Es una canción muy importante para nosotros porque nos ha ayudado a abrir un camino que nunca nos hubiéramos imaginado; para mucha gente es una canción que le ha servido para muchos momentos, que lo hemos compartido y hoy no podía faltar”, ha apuntado Cifuentes, que ha dado las gracias a los asistentes “por regalarnos todo este caudal de amor”.

Puente ha explicado que hay “muchos motivos” para dar el nombre de una calle de Valladolid a Celtas Cortos, “porque son de valladolid y lo proclaman siempre, han vendido más de dos millones de discos y han dado más de 2.000 conciertos, con maravillosas canciones a lo largo de sus 14 discos; siempre apoyado al deporte de Valladolid, solidarios con muchos proyectos, continuando con la misma filosofía con la que empezaron”.

Sobre esos orígenes, Puente ha recordado que el germen del grupo comenzó en el Instituto Delicias, alrededor de un colectivo de alumnos que compartían interés por la música, en particular por aquella que tenían que ver con el folclore.

“Merecéis este reconocimiento, disfrutadlo”, ha concluido Puente antes de descubrir una de las placas que indica el nombre de la calle, que plasma en el asfalto y los edificios una de las raíces culturales más reconocibles del Valladolid de las últimas décadas.