El déficit del conjunto de las administraciones públicas se situó en 9.955 millones de euros hasta febrero, lo que supone el 0,82 por ciento del PIB (un 10,2 por ciento menos que en el mismo periodo del año pasado), mientras que el déficit del Estado se situó en el 0,37 por ciento del PIB hasta marzo, con 4.459 millones de euros, según publicó este jueves el Ministerio de Hacienda.

La Administración regional disminuye su déficit hasta el 0,05 por ciento del PIB en febrero de 2018 por debajo del 0,12 por ciento contabilizado el mismo mes del año pasado.

En el caso de Castilla y León, también se ha reducido el déficit hasta el 0,14 por ciento del PIB, 86 millones de euros, frente al 0,17 por ciento por ciento registrado el mismo mes de 2017, es decir, 95 millones de euros.

Esta evolución de las comunidades se explica por un incremento de los recursos del 6,2 por ciento. Destaca el incremento del 9,6 por ciento de las transferencias recibidas de otras Administraciones Públicas, por los mayores anticipos a cuenta de los recursos del sistema de financiación, que han ascendido a 577 millones frente a 40 millones en 2017.

Los ingresos impositivos, por su parte, se han incrementado un 3,2 por ciento hasta los 9.031 millones, y destaca el incremento del 8,1 por ciento del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados.

En lo que concierne a los gastos, las transferencias en especie aumentan un 2,6 por ciento y los consumos intermedios y la remuneración de asalariados un 1,2 por ciento, mientras que los intereses registran una caída del 3 por ciento.