Condenado tras realizar "maniobras obscenas" haciéndose pasar por fisioterapeuta
El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Castilla y León (CPFCyL) ha informado este viernes de la condena a doce meses de prisión por intrusismo profesional a un hombre que se hacía pasar en Burgos por fisioterapeuta.
Los hechos se produjeron en verano de 2015, cuando una clienta acudió a la consulta del individuo junto a su marido para tratarse de molestias en una rodilla y, tras quedarse a solas con el acusado, éste le realizó maniobras obscenas por las que también ha sido condenado a un año de prisión y una indemnización por un delito de abuso sexual.
Al parecer, y en lo que al ejercicio profesional se refiere, el ahora condenado utilizó en la atención a la cliente una serie de aparatos para cuyo uso no le habilitaba la titulación de licenciado en Ciencias de la Actividad Física y Deporte, que es la que poseía.
En la sentencia se considerado probado que el condenado llevaba a cabo en un establecimiento de Burgos desde 2015 una actividad terapéutica, de readaptación biofísica y planificación de planes de nutrición para enfermedades, así como estudios antropométricos, pulmonares, espirométricos y otro tipo de tratamientos careciendo de la titulación habilitante como fisioterapeuta, necesaria para la aplicación de este tipo de tratamientos.
El acusado aportó en el juicio, junto a su titulación de licenciado en Educación Física, una serie de títulos de cursos supuestamente habilitantes para las actividades terapéuticas que publicitaba en su centro, que el juzgado ha desechado al no tratarse de titulaciones regladas.
La sentencia por intrusismo profesional, que el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Castilla y León ha calificado de "muy positiva", ha elevado en un año la pena y le ha condenado al pago de las costas del procedimiento.