Éxtasis, locura, desenfreno... definanlo como quieran. Eso es lo que se está viviendo en esta preciosa tarde de domingo por las calles de la capital del Pisuerga tras el mágico ascenso del Real Valladolid en la noche de ayer.

Tras cuatro años en el infierno, la fiel afición del conjunto blanquivioleta tenía ganas de ver a su equipo en la máxima categoría del fútbol español y hoy ha salido en masa para dar la enhorabuena a sus campeones.

Los Mata, Hervías, Sergio González y compañía no han tenido mucho tiempo para descansar ya que ayer la fiesta se prolongó hasta más de las 12:00 horas en el estadio José Zorrilla y hoy el equipo tenía que pasar por Ayuntamiento y Diputación.

A eso de las 18:00 horas y a bordo de La Leyenda del Pisuerga, el equipo al completo ha surcado las aguas del río que lleva el mismo nombre para llegar hasta Moreras, donde han montado en un autobús descapotable, a eso de las 19:00 horas.

Sonrisas, diversión y alguna otra cerveza entre unos futbolistas que miraban atónitos como miles de personas se agolpaban por Isabel La Católica, San Ildefonso, Paseo Zorrilla, Plaza España, hasta llegar a la Plaza Zorrilla.

En uno de los epicentros de la ciudad han sido recibidos por el alcalde, Óscar Puente y por el concejal de deportes, Alberto Bustos arrancando la fiesta en la Acera Recoletos con una afición entregada.

Este equipo ha vuelto a hacer creer y ha llevado la fe a una afición que vuelve a ver a su equipo en Primera.