El Partido Popular se halla inmerso en un periodo de incertidumbre tras la moción de censura que le ha apartado del poder a nivel nacional y sobre todo dejado sin su líder, pues Mariano Rajoy ha convocado un congreso extraordinario y vuelto a su profesión de registrador de la propiedad. Registradas precisamente hasta el momento hay seis candidaturas para sucederle, con la pugna entre Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal ya hecha pública y Pablo Casado como tercera vía. En el PP de Salamanca también hay un reino de taifas por la sucesión, pero de momento latente.

La próxima designación del alcalde, Alfonso Fernández Mañueco, como candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León mantiene a varios aspirantes en la recámara. Por un lado, esperan su turno primero para ocupar la Alcaldía de forma interina hasta las elecciones municipales de 2019, pues se espera que Mañueco renuncie a ser alcalde para centrarse en la candidatura autonómica, y después para ser el elegido o elegida a ocupar el cartel que cope las calles de la capital charra durante la campaña electoral.

Varios son los nombres que suenan para suceder a Mañueco. Dos son los principales, precisamente los tenientes de alcaldes Carlos García Carbayo, responsable de Fomento y Patrimonio, y Carmen Sánchez Bellota, responsable de Educación y Participación Social. El primero no ha negado tajantemente sus aspiraciones y ayer, preguntado al respecto, dijo: "Estoy dispuesto a presentarme o a coger el botijo, a aquello que me pida mi partido". Carbayo era visto más como consejero o director general si Juan Vicente Herrera hubiera dimitido ya y dejado a Mañueco ocupar la Presidencia de la Junta hasta las elecciones, pero ese momento se ve cada vez más lejano. Entonces Carmen Sánchez hubiera sido la elegida, pero si Carbayo queda en Salamanca es ahora quien tiene más papeletas. Y hay una tercera vía que suena, la del concejal de Cultura y Turismo, Julio López Revuelta.

La diferencia con el PP nacional es que Mañueco es partidario de candidaturas de consenso, que haya unidad y no síntomas de división con primarias y camarillas enfrentadas. Así que la sucesión será un proceso rápido. Después llegarán las elecciones, donde incluso suenan nombres de otras administraciones públicas. Dos son los principales: Agustín Sánchez de Vega y Antonio Andrés Laso. El primero era el elegido por Mañueco para sucederle si durante la pasada legislatura se hubiera consumado el relevo de Herrera, de hecho De Vega era el teniente de alcalde. El segundo se suma a las quinielas ahora que su estancia al frente de la Subdelegación del Gobierno parece tener los días contados con la llegada del PSOE al Gobierno, designando ya una delegada de Castilla y León socialista que a buen seguro designará a gente de su confianza en cada provincia.