Proliferan los bares con límite de tiempo para consumir en terrazas
Este jueves 21 de junio es el Día Mundial de la Tapa, una jornada para ensalzar la gastronomía de bares y restaurantes, sobre todo en Salamanca, la segunda ciudad de España con más establecimientos hosteleros por habitante. Un día que este año llega con una práctica cada vez más extendida, establecer un límite de tiempo para consumir en las terrazas.
Con la llegada del calor, las terrazas de bares y restaurantes se llenan, más en la capital charra, donde es una de sus costumbres. Sin embargo, el espacio para ocupar determinado espacio de las aceras y parques es limitado, de ahí que no siempre sea fácil encontrar una mesa libre. Sobre todo porque hay clientes que las ocupan durante excesivo tiempo.
Este tipo de cliente no es rentable para los negocios hosteleros, pues hay quienes pueden llegar a permanecer hasta horas con un café mientras leen la prensa o cualquier libro mientras no hay mesas disponibles para familias que llegan incluso a cenar. Por eso, cada vez son más los bares que especifican en sus carteles y tablillas exteriores el tiempo que se puede permanecer como máximo sentado en el mismo sitio. En algunos son muy restrictivos y sólo conceden media hora de margen, en otros más permisivos y hasta una hora.
Esta práctica no es nueva en España. En Granada incluso se creó la denominada 'Brigada de Intimidadores de Terrazas' para ayudar a los bares a desalojar a los clientes que se eternizan en las mesas con una sola consumición. Los intimidadores se arriman a una mesa que tenga las bebidas ya acabadas para presionar a sus ocupantes hasta que paguen y se vayan. Por el momento no se ha llegado a tanto en Salamanca.