Los objetivos más insospechados de los grafiteros Meas, Atun, Donk
La Policía Nacional ha detenido a nueve grafiteros por cometer 105 delitos de daños en trenes y vagones de toda España, entre ellos los conocidos salmantinos que firman como Meas, Atun y Donk. Los arrestados conformaban un grupo, crew en el argot callejero, de carácter itinerante y que han actuado de forma reiterada en trenes en las provincias de Madrid, Salamanca, Valladolid, Segovia, Ávila, León, Murcia, Valencia y Asturias. El valor de los daños causados asciende a unos 420.000 euros.
Sus pintadas no sólo se encuentran por toda la provincia charra, de donde son originarios Meas, Atun y Donk, también trascienden al resto de España. En lo alto del viaductos del AVE, en vagones de tren, en azoteas de edificios, en naves en mitad de la nada... no había límites para estos vándalos. Sus grafitis están en los lugares más insopechados.
Para cometer los hechos delictivos, los detenidos realizaban un estudio previo del lugar y comprobaban si existían vigilantes de seguridad o dispositivos técnicos de vigilancia, ocultando sus rostros con gorros o bufandas para dificultar su identificación. El grupo tenía un claro reparto de tareas a la hora de realizar la pintada. Varios de ellos formaban una hilera para distribuirse a lo largo de todo el convoy, otros vigilan y otros graban el grafiti para posteriormente difundirlo por redes sociales.