Sotoserrano y los municipios extremeños del entorno han vivido durante una semana una nueva edición de The Lost Theory Festival. Un evento musical que este año se celebró por séptima vez con miles de aficionados a la música electrónica psicodélica y amantes de la naturaleza. Procedentes de toda Europa para aunar sus pasiones en un entorno privilegiado de la salmantina Sierra de Francia y también de Las Hurdes, junto al cacereño municipio de Riomalo de Abajo.

Pero, como siempre, deja división de opiniones. Para sus defensores, es un lugar para expandir la mente con una experiencia audiovisual de calidad y con artistas experimentales que ayudan a disfrutar de las delicias de la naturaleza, todo ello en la búsqueda de creación de paz y relajación a través de la pureza de la música y la decoración orgánica.

En cambio, para sus detractores, no es más que un aquelarre repleto de drogas, donde predominan los jóvenes cargados de éxtasis, LSD y antefaminas, para llegar un momento en que no bailan al ritmo de la música, sino que deambulan cual zombies. Los datos ofrecidos por la Guardia Civil inclinan la balanza hacia lo segundo. Durante el dispositivo especial llevado a cabo se ha incautado todo tipo de sustancias estupefacientes, llevando a cabo varias detenciones.

Por ejemplo, el 12 de julio a las 11:30 en el término municipal de Sotoserrano a un hombre de 62 años, A.E., natural de Rumanía, con 425 gramos de setas alucinógenas, 205 de hachish, 0,5 de polen de hachish, 6 pastillas de guaraná, 50 de cardo mariano, 2 cogollos de marihuana, 407 euros, 905 dolares de Estados Unidos y 7 dracmas griegos. Fue enviado directamenta a la cárcel de Topas. Ese mismo día, a las 18:50 horas, se llevó a cabo la detención en Sotoserrano de un joven de 31 años, A.G.K., natural de India, con 100 dosis de alucinógenos tipo LSD.

El 16 de julio, a las 19:40 horas en Sotoserrano, se detuvo a un hombre de 48 años, D.L., natural de Holanda, con 22 dosis de alucinógenos tipo LSD y 1,2 gramos del compuesto psicodélico DMT (conocida como la molécula de Dios). También fue enviado a la cárcel de Topas.

Además, se han llevado 146 denuncias administrativas por posesión de sustancias estupefacientes (un 400% más que la edición anterior) y veinte por tenencia de armas prohibidas como navajas, machetes, defensas extensibles, etcétera (el 600% más).  Todo ello con la incautación de 435 gramos de marihuana, 504 de setas alucinógenas, 169 dosis de LSD, MDMA y metanfetamina, 10,5 gramos de cocaína, 160 de hachís y 4 de speed.

Por su parte, los guardias civiles del Subsector de tráfico de Salamanca han detectado un total de 40 positivos por conducción bajos los efectos de distintas sustancias estupefacientes (10% más que la edición anterior) y un positivo por conducción bajo los efectos del alcohol. Y por parte del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) se ha procedido a formalizar cinco denuncias, una de ellas a la organización del festival como consecuencia de haber ocupado el dominio público hidráulico sin autorización y otra por el uso de un dron de manera irregular.