CyL, en contra del objetivo de déficit marcado por el Gobierno
La consejera de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, Pilar del Olmo, ha justificado su voto en contra a la propuesta del Gobierno de aumentar en dos décimas el objetivo de déficit para las comunidades autónomas en 2019 durante la reunión de este jueves del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) al considerar que la regla de gasto "hace ineficaz" el aumento de este margen.
En declaraciones posteriores a la reunión, Del Olmo ha defendido que su voto en contra es "coherente" con su postura de rechazo a un mayor déficit que supone "más deuda" para las autonomías en lugar de dotarlas de mayor financiación a través de una reforma del modelo actual.
A esto ha sumado el hecho de que, a pesar de que el límite de déficit resulte mayor, existe una regla de gasto que impide que las comunidades amplíen su gasto, por lo que será "ineficaz" esta ampliación del margen.
No obstante, la consejera ha alabado que el Ministerio de Hacienda se haya comprometido a iniciar los trabajos para la reforma de la financiación autonómica, para lo que "a la vuelta del verano se reunirán de nuevo los directores generales para medir la insuficiencia que tienen las comunidades autónomas", en contra del anuncio que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, realizó en su día en el que renunciaba a tramitar la reforma por incapacidad temporal.
Por otro lado, Del Olmo se ha felicitado por el compromiso del Ejecutivo central de transferir a las regiones el coste de servicios que deberán asumir por decisión del Gobierno, como la extensión de la sanidad universal a inmigrantes en situación irregular.
En cuanto a una posible reestructuración de la deuda, ha advertido de que "no se ha hablado específicamente de ello", aunque sí se ha planteado "abordarla" en próximos encuentros, al hilo de lo cual ha subrayado que, en caso de hacerse, Castilla y León pedirá que sea "equitativa".
Junto al Gobierno se han posicionado en la reunión de este jueves las comunidades de Asturias, Castilla-La Mancha, Aragón, Andalucía, Baleares y Extremadura, todas gobernadas por el PSOE, y Cantabria, del PRC, mientras que en contra han votado la Comunidad de Madrid, Castilla y León, Galicia, Murcia y La Rioja y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, controladas por el PP, además de Canarias, de Coalición Canaria.
La Comunidad Valenciana, en la que gobierna el socialista Ximo Puig, ha registrado la única abstención de la votación.