La periodista burgalesa Rosa María Mateo ha sido propuesta por el Gobierno como administradora única para gestionar RTVE. Para efectuar su nombramiento definitivo deberá conseguir la mayoria de los apoyos del Congreso. 

El Ejecutivo apuesta por Mateo por ser una importante imagen televisiva de la transición y que desarrolló su profesionalidad durante la década de los 80 y de los 90 con la presentación y conducción de durante la década de los 80 y de los 90 con la presentación y conducción de algunos de los programas informativos más importantes de la televisión en España, telediarios y el prestigioso Informe Semanal

Rosa María Mateo tiene 76 años y trabajó en la Corporación durante 30 años. Comenzó su carrera en RNE en 1963, mientras que en los 70 pasó a TVE en donde ha presentado espacios como Informe Semanal o el Telediario. En 1993 fue fichada por Antena 3, en donde presentó las noticias durante diez años.

En el ámbito político, la periodista se posicionó durante las elecciones de 2011 a favor del candidato socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, uniéndose a la plataforma 'Ojalá' que apoyaba su camino hacia la Moncloa.

La propuesta del Gobierno ha consensuado con todos los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados que apoyaron el Real Decreto-Ley de RTVE, que son Podemos, PNV, Pdcat, ERC, Compromis, UPN, Nueva Canarias y CC.

En este sentido, con la aprobación del Congreso, Mateo será la encargada de dirigir RTVE, de manera transitoria, hasta la incorporación de la nueva administración resultante del concurso público que elegirá la Presidencia y el Consejo de Administración del Ente Público.

Esta nueva elección aparece tras el fracaso en la renovación de los diez miembros del Consejo de Administración de RTVE que se ha llevado a cabo en el último mes en el Congreso, bajo las directrices del decreto ley que aprobó el Gobierno el pasado 22 de junio para llevar a cabo este proceso. La Cámara baja eligió a los seis consejeros que le correspondían de una lista pactada entre PSOE, Podemos y PNV, mientras que en el Senado las candidaturas presentadas, una del PP y otra pactada entre PSOE y Podemos, no obtuvieron la mayoría necesaria. Según el decreto ley, si la Cámara alta no era capaz de elegir cuatro nombres por mayoría, el nombramiento pasaba de nuevo al Congreso.

Previamente a esta situación, el periodista Tomás Fernando Flores iba a ser nombrado presidente de RTVE, pero no se pudo realizar por la ausencia de dos diputados al Pleno y por el error de otros dos diputados al introducir sus papeletas correspondientes. De esta manera, se dejaban los votos a favor a los candidatos de PSOE y Podemos en 175, a uno de obtener la mayoría absoluta.

En consecuencia, el decreto ley determina que es el Gobierno quien debe elegir un administrador único para la Corporación, que deberá ser ratificado en el Congreso por la mayoria. Inicialmente, no se descartaba la idea de que fuera Fernando Flores quién ocupara ese puesto, el Gobierno rechazó esa posibilidad e informó de la búsqueda de un nuevo perfil para ocuparse de la administración de RTVE.