La media veda en Castilla y León comienza este miércoles, 15 de agosto, con veinte días hábiles hasta el 16 de septiembre, en los que se podrá cazar conejos, mientras el comienzo de la temporada se retrasa hasta el día 25 para la tórtola común y todas las palomas. Una temporada con importantes novedades y la alerta por la presencia en el campo de garrapatas con el virus de la fiebre de Crimea-Congo, que la semana pasada provocó la muerte a un cazador abulense que no tuvo precauciones durante una montería de jabalíes en Badajoz.

Respecto al conejo, se ha analizado la sobreabundancia de esta especie y los daños causados en los cultivos agrícolas por lo que la Orden propone flexibilizar las condiciones de captura y aumenta un 60 por ciento el número de municipios en los que se amplían los periodos y medios de captura, una medida que afecta a 274 municipios. En todos ellos se podrá cazar conejo además en el periodo comprendido entre el 28 de enero y el 24 de febrero, coincidiendo con la época más sensible para la nascencia de los cultivos.

En cuanto a la caza mayor, la temporada montera se extenderá desde el domingo 23 de septiembre hasta el domingo 24 de febrero de 2019, "haciendo coincidir las fechas de aprovechamiento en cacerías colectivas, monterías, batidas o ganchos, tanto del jabalí como del ciervo y lobo", han precisado las mismas fuentes.

En la media veda, se retrasa el comienzo de la época hábil al domingo 25 de agosto para la tórtola común y todas las palomas para tener en cuenta la finalización del período de cría de estas dos especies. La temporada general para la caza menor comenzará el domingo 28 de octubre de 2018 y finalizará el domingo 27 de enero de 2019 y, en el caso de la caza de la liebre con galgo, la temporada arrancará el viernes 12 de octubre y finalizará el domingo 27 de enero de 2019.

Se han incluido todas las palomas como especies cazables durante la media veda y también se han tomado medidas para garantizar el estado favorable de conservación de determinadas especies, en particular las migratorias. En este sentido se ha establecido un cupo de 25 codornices y cuatro tórtolas comunes por cazador y día y también se ha establecido un cupo máximo de tres capturas para el avefría y las agachadizas.

Flojo inicio por el retraso de la cría de codornices

El presidente de la Federación de Caza de Castilla y León, Santiago Iturmendi, ha calificado de "floja" la apertura de la media veda en Castilla y León debido al retraso de la cría de codornices en la Comunidad.

Aunque se anticipaban favorables debido a las buenas cosechas y las óptimas condiciones meteorológicas "no se han cumplido las previsiones de caza", ha lamentado Iturmendi en declaraciones a Europa Press. "Se ha criado tarde, se ha retrasado todo este año y se han visto aún muchos pollos, por lo que ha ido peor de lo esperado", ha explicado en relación al inesperado balance de esta primera jornada.

No obstante, aunque la apertura ha resultado "floja" en toda la región, provincias como Burgos, Palencia y León han sido algunas de las "más afortunadas" al situarse por encima de la media. "Las previsiones de campaña han descendido en los últimos años", ha recordado Iturmendi, quien, sin embargo, ha señalado que aunque esta campaña se anticipa "mejor" que la pasada, 2017 "tampoco fue un año de referencia", puesto que la sequía fue la "protagonista". Por otro lado, "la cría tardía significa que habrá codornices durante toda la media veda, pues esos pollos crecerán y se irán cazando", ha indicado Iturmendi.