El consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, ha insistido en el peligro que supone la deslocalización de empresas que, como ha ocurrido con Vestas, se benefician de fondos europeos para, después, deslocalizarse y producir "más barato y en condiciones laborales mucho peores" que las permitidas por la Unión Europea (UE).

Esta será, según ha recordado el consejero, una de las principales reivindicaciones de la delegación --conformada por Junta, sindicatos y Cecale-- que partirá este lunes, 24 de septiembre, a Bruselas para reunirse, a partir de mañana, con el Consejo Económico y Social de Europa, la confederación intersindical Industriol-CES y diputados españoles.

"Las subvenciones de fondos europeos a empresas privadas no pueden servir para que dichas compañías se marchen a territorios fuera de la UE", ha sentenciado Carriedo, quien ha destacado la "importante unidad" entre partidos políticos españoles en el ámbito europeo, algo que se debe "transmitir al resto de foros".

Aunque se trata de un problema que atañe, en primera instancia, a Castilla y León, "no puede ser ignorado por la UE", porque "se corre el riesgo de desindustrializar el conjunto de la Unión", ha concluido el consejero.

Por su parte, el vicepresidente de Cecale, José Ignacio Carrasco, ha afirmado que "entiende que los trabajadores van a quedar desamparados" pero también que la empresa "debe tener libertad para tomar su propia decisión siempre y cuando esté argumentada". En cualquier caso, ha agregado, "la obligación de las administraciones es velar para que el empleo continúe".