Herrera pide a Sarrión que no genere "dos bandos" sobre Berkeley

El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha aclarado este martes al portavoz del Grupo Mixto, el procurador de IU-Equo, José Sarrión, que la pelota sobre el proyecto de la minera de uranio de Berkeley en Retortillo (Salamanca) no está en el tejado del Gobierno regional al que ha reivindicado además como un Ejecutivo "serio" a diferencia de las "repúblicas bananeras".

Herrera ha apelado a esa "seriedad" para asegurar a Sarrión que la Junta actuará siempre de acuerdo con la ley y con los documentos de los distintos organismos encargados de realizar los informes sobre la materia a través de una normativa "sumamente garantista" y de un procedimiento "reglado" por parte de profesionales independientes.

"Ni defendemos ni atacamos", ha aseverado el presidente de la Junta que se ha asegurado que su gobierno es objetivo y no es discrecional como sí ha achacado al procurador de Iu-Equo al que ha afeado por tener una posición ideológica de inicio y de dibujar dos bandos de buenos y malos donde incluye al PP entre los "enemigos del planeta".

Según ha recordado el presidente de la Junta a Sarrión, el proyecto de la mina de uranio de Berkeley en Retortillo tiene un origen en un acuerdo de Consejo de Ministros con fecha de abril de 2009 cuando se dio el visto bueno a un consorcio entre Enusa y la empresa minera para analizar las posibilidades de la mina de uranio.

Finalmente, el presidente de la Junta ha expresado su máximo respeto tanto a las manifestaciones en contra de este proyecto como en las movilizaciones a favor.

Por su parte, José Sarrión ha exigido en su tercer cara a cara con Herrera sobre este asunto un "posicionamiento crítico" de la Junta para poner fin a lo que ha considerado un "desatino" y un "despropósito" que, de seguir adelante, destruirá el tejido agrícola y ganadero de la zona.

"Claro que tienen un posicionamiento ideológico", ha reprochado Sarrión a Herrera en referencia a la Estrategia de Recursos Minerales de la Junta para potenciar los sectores mineros como elemento central de la economía, en ocasiones, "a costa de lo agroganadero".