Hay enfermedades que por ser imperceptibles a simple vista no son menos dolorosas que otras. Cada vez con una mayor incidencia en la sociedad. Es el caso de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal, que engloba dos patologías, la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. Ambas se caracterizan por afectar al intestino esencialmente, siendo inflamatorias y crónicas, que evolucionan entre brotes y periodos de remisión. Así, alteran la capacidad del organismo para digerir los alimentos y absorber los nutrientes y comparten además características clínicas y patológicas, como diarrea, sangre en las heces, cansancio, dolor abdominal, pérdida de apetito, pérdida de peso y fiebre.

Para atender a estos pacientes se puso en marcha en 1987 la Asociación de enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa (ACCU), sin ánimo de lucro, con el objetivo de ampliar el apoyo y los servicios que reciben quienes padecen estas enfermedades, reducir el impacto que les provoca en un momento dado e incrementar, como consecuencia, la calidad de vida. En Salamanca dispone de un local en la Casa de las Asociaciones de la calle La Bañeza 7, atendiendo de forma presencial los jueves de 19:00 a 21:00 horas, aunque también se puede contactar con ellos a través del correo electrónico salamanca@accuesp.com o el teléfono 923 13 48 11.

La causa concreta de las enfermedades intestinales se desconoce, aunque se cree que puede deberse a la interacción de factores genéticos, ambientales y a cambios en la microbiota intestinal. De lo que se desprende, por lo tanto, que los pacientes no son culpables de la aparición de su enfermedad porque no se desencadena por algo que se hace o se deja de hacer, como la dieta o el estrés. “Cuando se diagnostica el enfermo se cuestiona por qué la ha contraído y es fácil caer en el desánimo”, explican desde la asociación. “Por esto mismo, para prevenir que te veas envuelto en una espiral de emociones, queremos compartir propuestas con las que aumentar los conocimientos sobre la enfermedad y los recursos que disponemos para gestionarla. Con información contrastada y de calidad”.

En primer lugar, ACCU ofrece orientación y acompañamiento, informando sobre temas emocionales y psicológicos, como afrontar el miedo, la culpa, la inseguridad y todas las emociones que surgen con la enfermedad. También de enfermería, sobre los cuidados más adecuados para poder tener una buena calidad de vida, médicos para entender mejor lo que está pasando, nutricionales para usar los alimentos como aliados en el control de la enfermedad intestinal. También laborales, para que la enfermedad tenga la mínima repercusión en tu trabajo, y legales cuando se trata de cuestiones relacionadas con la enfermedad, como el reconocimiento del grado de discapacidad o incapacidad.

Entre los servicios especializados, la asociación ofrece tratamientos a través profesionales y expertos que conocen muy bien la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. También una terapia para superar la ansiedad para salir de casa, un apoyo para solicitar el reconocimiento del grado de discapacidad u otras personas con la enfermedad que explique lo último en cuidados específicos. “Lo que no existe es una única manera de recibir este servicio. La mayoría de las veces es prestado por los profesionales que colaboran con ACCU, otras, sin embargo, es llevado a cabo por los técnicos de instituciones con las que tenemos acuerdos. Siempre, eso sí, adaptándonos a los pacientes y sus necesidades. De esta forma las actividades se desarrollan en grupo o a través de un servicio individual y personalizado”.

Además, desde la asociación se ofrecen talleres de ocio y deportes. “Nos gusta pasar buenos ratos juntos. En la asociación todos se conocen bien aunque sea la primera vez que se ven. Es fácil sentir que estás entre amigos. Hay experiencias que unen y esas son las que buscamos para disfrutar de la vida, como ocurre con el deporte y las actividades de tiempo libre. Por esto organizamos actividades para que desde el niño hasta el más mayor se divierta, como encuentros de jóvenes, excursiones, salidas para hacer deporte y convivencias”. Porque el objetivo principal es mostrar a cada enfermo que no está solo y que puede salir adelante, que siempre hay un alivio para su lucha diaria.