Amenaza de concentraciones por el precio de la remolacha
La Unión de Campesinos en Castilla y León (UCCL) se movilizará ante la sede de AB Azucarera Iberia en Madrid y sus fábricas si persiste en su decisión de rebajar en 6,5 euros el precio por tonelada de remolacha, al considerar que dicha "medida unilateral" supone desmarcarse del Acuerdo Marco Interprofesional (AMI) suscrito en 2015 y obliga a los remolacheros a "cultivar a pérdida".
"No lo podemos consentir, hay que intentar que las administraciones le pongan en su sitio, una empresa no puede saltarse las reglas del juego", ha denunciado este viernes públicamente Juan Antonio Rodríguez, responsable del sector en UCCL, quien, junto con el presidente de la organización en Valladolid, Nacho Arias, recuerda que la rebaja aplicada por Azucarera tiene su origen en una AMI que ya en su día la Unión de Campesinos se negó a firmar por que estaba lleno de "trampas".
Esa redacción llena de "lagunas" es la que, según UCCL, está utilizando ahora por Azucarera para dar el "golpe definitivo, la puntilla" a un sector en el que los remolacheros "habían hecho los deberes" modernizando sus explotaciones e invirtiendo para ser más competitivos y que ahora pueden perder cerca de 12 millones de euros.
"Lo que pretende ahora Azucarera es que los remolacheros cultiven a pérdida, y no lo vamos a consentir", amenaza Rodríguez, quien pone como ejemplo contrario, "sin salir de esta Comunidad", la política de precios de ACOR, que está garantizando un precio por tonelada de 42 euros hasta 2023.
"A menos de 42 ya dijimos en su día que no cultiva ni Dios", ha espetado Arias para resumir la situación ahora planteada por Azucarera, que, como así denuncia el sindicalista, supone la "puntilla" para un sector que desde 2011 ha visto reducir un 47 por ciento la superficie sembrada en Castilla y León y en un 27 por ciento el número de cultivadores, en referencia a que se ha pasado de 50.000 a 24.000 hectáreas--7.000 en Valladolid--y de 6.000 remolacheros a no más de 3.305, de ellos 890 en la provincia vallisoletana.
Aunque otras organizaciones profesionales barajan acudir a la vía del arbitraje para denunciar la rebaja anunciada por Azucarera, UCCL duda del resultado de las reclamaciones debido al articulado de un AMI, insiste, "lleno de trampas", por lo que, amén del llamamiento realizado a las administraciones central y regional para que "paren los pies" la multinacional, ven como principal vía para "demostrar el malestar" que los cultivadores dejen de sembrar "si no lo ven claro".
La OPA es consciente, no obstante, de que esta alternativa podría tener un "efecto dominó" en otros cultivos si los remolacheros optaran por destinar sus tierras a otro tipo de producciones, provocando una caída de los precios de éstas.
Llamamiento a ACOR
UCCL ha hecho también un llamamiento a ACOR para que asuma más producción de la inicialmente contemplada, si bien es consciente de que su capacidad no puede exceder de las 15.000 hectáreas como mucho, al tiempo que ha denunciado los intentos de Azucarera por convertirse también en cultivadora mediante la adquisición de superficie a través de su filiar Agroteo.
"Si son mal gestores y ahora se meten a cultivadores, que Dios nos proteja. Los cultivadores que se dediquen a cultivar y los productores a producir", ha aconsejado Nacho Arias, que acusa también a la Junta de Castilla y León de ser en parte responsable de la situación del sector por impago a los cultivadores.
De hecho, ha recordado que la Junta adeuda aún 3 euros a los cultivadores por las producciones de 2011 y 2012, en total 10 millones de euros, y ello pese a numerosas sentencias judiciales que dan la razón a los perjudicados.
Los responsables de UCCL se quejan igualmente de que los precios del sector se firman en Madrid a pesar de que Castilla y León produce el 80 por ciento de la remolacha en España, de ahí que reclame la constitución de una mesa en la Comunidad donde poder fijar la política de precios.