Comidas y cenas de Navidad serán más caras este año
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha puesto en marcha como cada año su observatorio de precios navideños, que tiene como objetivo comprobar cuánto suben los precios de los productos de alimentación típicos de las fechas navideñas. Para ello, va a monitorizar los precios de una selección de quince de productos en mercados municipales, supermercados e hipermercados.
OCU va a controlar el precio de los siguientes productos: cordero lechal para asar por cuartos, redondo de ternera, pularda, pavo, jamón ibérico de cebo al corte, lombarda, piña, besugo, lubina de acuicultura, merluza al corte, angulas, langostinos cocidos, percebes gallegos, almejas y ostras. Se recogerán los precios un mes antes de la Navidad, quince días antes y un tercer control se llevará a cabo los días previos a la Nochebuena.
Con los datos obtenidos en el primer control, OCU ha hecho la comparación con los precios un mes antes de navidades del año pasado. La conclusión es clara: en 2018, las comidas y cenas navideñas serán más caras que en 2017.
Los resultados del estudio demuestran que este año las comidas navideñas saldrán un poco o bastante más caras, dependiendo del producto que utilicemos. Todos los pescados (salvo la lubina), los mariscos, las frutas y verduras suben de precio respecto al año pasado. Por el contrario, todas las carnes han registrado descensos, salvo el pavo, que sube.
Las angulas (90%) y sobre todo los percebes (99%) son lo que más sube, seguidos por las ostras (29%). La pularda es la que más baja (11%) seguida de la lubina (2,7%) el único pescado que baja de precio. En general las subidas tienden a ser mucho más intensas. La mayoría superaban el 10% (salvo la lombarda, la merluza y el pavo). Las bajadas, por el contrario, se mueven en el entorno del -1% al -3%.
Teniendo en cuenta lo que ha sucedido otros años, OCU espera que estos precios sean inferiores a los que obtendrán en las vísperas de las celebraciones navideñas. Por ello, aconseja a los consumidores que adelanten las compras de los productos de alimentación o bien opten por la preparación de menús alternativos con productos que tengan un menor precio.