El Centro de Salud del Barrio de San José en Salamanca, que también presta atención sanitaria a otros barrios anexos de la margen izquierda del río Tormes, se encuentra en una situación lamentable y tercermundista según denuncian tanto los profesionales que allí prestan sus servicios, como los pacientes y usuarios que reciben consulta médica a diario.
Tal y como muestran las fotografías, casi la totalidad de las dependencias se encuentran en un estado lamentable y una situación tercermundista, sin las mínimas condiciones en cuanto a salubridad, seguridad, habitabilidad y dotación de material, mobiliario, servicios básicos y equipamientos.
En algunas salas, pasillos y dependencias, incluidas las consultas, la iluminación y la calefacción es escasa o no llega e, incluso, carecen de ella. Una situación que ha obligado a tener que reorganizar dichas consultas y ubicar, por ejemplo, las de pediatría, donde los niños se tienen que desnudar, en aquellos despachos donde la calefacción alcanza o que los propios trabajadores tengan que llevar calefactores de sus propias casas.
Los pacientes con movilidad reducida ven dificultada o imposibilitada el acceso a algunos sitios por la existencia de escalones o la falta de adaptabilidad. Tanto los usuarios, pacientes como los trabajadores y profesionales conviven a diario con estancias en las que la grietas y las goteras, tanto en suelos como en paredes y techos, están a la vista de todos. A lo que se suma el envejecimiento por falta de cuidados, mantenimiento o reposición de la pintura entre otro tipo de obras y que hace que la suciedad y los desconchones sea visible por toda la estructura.
La misma falta de mantenimiento y reparación que existe en el mobiliario y accesorios donde es fácil y habitual encontrar puertas y ventanas que no cierran o cajas de suministro de agua o electricidad con puertas caídas, en mal estado, sujetas de mala manera y con todos sus interruptores o llaves visibles, sin ningún tipo de seguridad o accesibles a todo tipo de personas con la consiguiente peligrosidad.
Tanto en dependencias sanitarias, como en pasillos, zonas comunes y salas de espera se esparcen y acumulan cables eléctricos y enchufes a la vista y al alcance de todos, sin ningún tipo de seguridad, control o norma en cuanto a su instalación. Dependencias sanitarias y despachos que en algunas ocasiones también sirven como almacén donde se acumulan trastos inservibles, mobiliario retirado o en desuso por falta de espacio habilitado para estas cuestiones, y donde el instrumental se deposita en simples estanterías, o las pruebas médicas tienen que ser guardadas o custodiadas sin las condiciones de temperatura y estanqueidad requeridas.
Una situación que se repite con las historias clínicas de los pacientes y otro tipo de documentos que se acumulan sin control en estanterías no apropiadas, sin ningún tipo de celo ni seguridad en cuanto a su protección, en una sala donde el acceso es factible a todo tipo de personas.
En este sentido, y tras esta denuncia efectuada desde hace mucho tiempo tanto por pacientes como por trabajadores, sin que a pesar de su gravedad haya sido atendida o tenida en cuenta por los responsables y la administración sanitaria de la Junta, el PSOE de Salamanca anuncia y hace público que va a presentar en todas las instancias que sean necesarias una exigencia reclamando las inversiones que sean necesarias para que se acometan, de manera urgente, las actuaciones que sean precisas para que en el Centro de Salud de San José se preste un servicio sanitario y se reciba una atención médica en las condiciones que tanto los profesionales como los usuarios merecen.