Un varón de 40 años cuya identidad responde a las iniciales F.J.A.T. ha sido investigado por un presunto delito de estafa tras hacerse pasar por agente de la Guardia Civil para sacar dinero a una empresa de Ágreda (Soria), según ha informado la Subdelegación del Gobierno.

La estafa se produjo el pasado 24 de enero cuando la empresa recibió una llamada telefónica de un varón que afirmó ser guardia civil y ofreció un espacio de publicidad en una revista de suboficiales del cuerpo a cambio de una cantidad de dinero.

El presunto estafador ofreció ese espacio publicitario a cambio de una cantidad de 300, 500 u 800 euros, en función del espacio a ocupar en la citada revista, e informó a su vez de que se trataba de una publicación con gran repercusión a nivel nacional y a través de redes sociales.

El equipo del Edite de la UOPJ de la Comandancia de la Guardia Civil de Soria logró identificar a una empresa unipersonal con sede en Madrid a través del móvil desde el que se efectuó la llamada y del número de cuenta donde debía ingresar la cantidad acordada.

Los agentes descubrieron que dicha empresa correspondía al titular F.J.A.T. de 40 años y que contaba con antecedentes delictivos por la comisión de estafas con el mismo 'modus operandi'.

Este caso se engloba en un nuevo delito de estafa tecnológica, cuya investigación se enmarca dentro de los protocolos de actuación de la Guardia Civil en esta tipología delictiva. Las diligencias instruidas fueron entregadas en el Juzgado de Guardia de Soria.

Intentos de estafa en Palencia 

Precisamente, empresas palentinas han sido también víctimas de un intento de fraude similar, después de que recibieran llamadas telefónicas para pedir dinero a cambio de anunciarse en la revista de la Benemérita.

En este caso, fueron dos los empresarios de Venta de Baños y Saldaña, los cuales no cayeron en la estafa, según ha informado el Instituto Armado, el cual recuerda que la única revista oficial y profesional de la Institución se llama 'Guardia Civil' y que, aunque existen otras revistas que incluyen en sus portadas el nombre del cuerpo con diversas fotografías de sus miembros, "son administradas por entidades particulares sin vinculación alguna con la revista oficial".

Asimismo, ha advertido de que en ocasiones se han empleado "métodos agresivos y poco ortodoxos" para captar anuncios de publicidad, pero que dicha actitud que "no se corresponde" con la forma de proceder de la Guardia Civil.