Fue un miércoles desapacible. La lluvia fue protagonista a lo largo y ancho de toda de la jornada en Valladolid y los Bomberos de la capital tuvieron que hacer frente a entre diez y doce salidas ni más ni menos.
Caídas de árboles y ramas, balsas de agua, etc. Un árbol cayó a la acera en el Paseo del Arco de Ladrillo a la altura del número 50, se tuvo que cortar el tráfico en Paseo Juan Carlos I por balsa de agua y el Campo Grande tuvo que ser cerrado para evitar males mayores.
Como siempre, la rápida acción de los Bomberos evitó cualquier tipo de susto mayor en la capital del Pisuerga.