El déficit de Castilla y León se ha situado en 120 millones de euros hasta marzo, lo que supone un 0,20 por ciento del PIB de la Comunidad, el mismo que hace un año, según los datos hechos públicos este martes por el Ministerio de Hacienda.
En el desglose de los datos del déficit público, la Administración central alcanzó un déficit de 7.579 millones en los cuatro primeros meses del año, el 0,6 por ciento del PIB, lo que supone un incremento del 0,13 por ciento.
En cambio, las comunidades autónomas disminuyeron su déficit un 3,4 por ciento, hasta los 1.234 millones, un 0,10 por ciento del PIB, debido al alza de los recursos (+5,1 por ciento), superior al aumento de los empleos (+4,9 por ciento).
Mientras, los Fondos de la Seguridad Social obtuvieron un superávit del 0,38 por ciento del PIB, un 147,1 por ciento superior al de marzo de 2018, tras elevar los recursos un 14,2 por ciento, gracias al fuerte incremento de las cotizaciones (+10,9 por ciento), siendo superior al aumento de os gastos (+7,2 por ciento).
El déficit del conjunto de las administraciones públicas, excluyendo las corporaciones locales y la ayuda financiera, bajó un 12,7 por ciento en el primer trimestre del año, hasta los 3.988 millones de euros, lo que equivale al 0,32 por ciento del PIB, por debajo del 0,38 por ciento del mismo periodo del año anterior.
Mientras, el déficit del Estado se elevó hasta abril un 39 por ciento en términos absolutos, hasta los 8.195 millones de euros, equivalentes al 0,65 por ciento del PIB, por encima del 0,49 por ciento del PIB registrado en el mismo periodo del año pasado.
El aumento del déficit del Estado en el primer cuatrimestre se debe fundamentalmente al crecimiento de los ingresos no financieros del 0,4 por ciento, hasta los 60.899 millones de euros, frente a un aumento de los gastos del 3,8 por ciento, hasta los 69.094 millones de euros.
Hacienda señala que, al igual que el mes anterior, esta evolución se debe, entre otras causas, a que en estos primeros meses se recoge un gasto sin equivalencia en el mismo periodo del año anterior. En concreto, se trata de una mayor subida de la remuneración de funcionarios y del alza de las pensiones, cuyas revalorizaciones computaron más tarde el año pasado tras la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado de 2018.
No obstante, fuentes del Ministerio de Hacienda aseguran que este efecto se mitigará en la segunda parte del año, cuando se hará "evidente" la reducción del déficit público.
De su lado, la cifra trimestral de déficit público de 3.988 millones (-12,7 por ciento), excluye el saldo neto de las ayudas a instituciones financieras y equivale al 0,32 por ciento del PIB, por debajo del 0,38 por ciento del año pasado. Si se incluye en ambos periodos el saldo negativo de la ayuda a las instituciones financieras, el déficit alcanza el 0,30 por ciento del PIB en abril.