El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León ha aprobado este jueves el gasto por importe de 200.376 euros para la organización e impartición de cursos de formación a los solicitantes de adopción en Castilla y León, por un período de 48 meses a partir de la formalización del contrato.
El objetivo de la formación es dotar de unos recursos parentales, asesoramiento, asistencia y apoyo a todas las personas que se ofrecen para la adopción, tanto de un menor en Castilla y León como de carácter internacional, en relación a los aspectos más relevantes de esta figura, a fin de favorecer un ajuste mayor entre las necesidades de los niños susceptibles de adopción y las expectativas de las propias familias.
Se ha estimado para todo el periodo de duración del contrato, 48 meses y 1.518 horas de formación, en las que el adjudicatario del contrato deberá poner, entre otros, recursos personales como un coordinador del programa de formación, a jornada completa, cinco licenciados en Psicología o titulación equivalente, otros tantos diplomados en Trabajo Social y un diplomado en Enfermería.
En 2018 aumentó el número de menores susceptibles de adopción nacional para los que se ha encontrado familia, 16 menores más que en el 2017. Así, se ha encontrado familia para un total de 50 menores, distribuidos entre 42 familias al haber 8 grupos de 2 hermanos. De los menores (24 niñas y 26 niños) a los que se les ha buscado familias el 55,5 por ciento tenían menos de dos años, el 44 por ciento tenían una edad entre 2 y 5 años y un 0,50 tenían más de seis.
De estos menores, el 26 por ciento no presentaban especial dificultad, mientras un 24 sí presentan características especiales, con un 50 por ciento que se han considerado niños de riesgo por antecedentes familiares, grupo de hermanos, edad o problemas de salud leves de los menores.
En cuanto a los 62 menores que están en espera, 36 presentan características de riesgo y 26 presentan necesidades especiales. La mayoría de las familias solicitantes de adopción en Castilla y León se ofrecen para menores sin especial dificultad, por lo que resulta especialmente difícil encontrar familias para menores con características de riesgo y necesidades especiales.
Adopción internacional
Por lo que respecta a la adopción internacional, se mantiene la tendencia descendente observada desde el año 2012, que es debida, sobre todo, a la prevalencia en los países de origen de la Adopción Nacional y el impulso de las medidas de protección a la infancia, pero también a que los tiempos de espera en los países de procedencia de los menores son cada vez más largos, con numerosos expedientes enviados y pendientes de resolver en el país.
Por otra parte, las características de los niños, cada vez más mayores y de riesgo, las periódicas renovaciones de la documentación y sus costes, la falta de países en los que poder tramitar la adopción internacional y el colapso sufrido por un gran número de países debido al elevado volumen de ofrecimientos de años anteriores, son limitaciones para que muchas familias inicien un proceso de adopción internacional.
Los expedientes tramitados hacia otros países han aumentado ligeramente, pasando de 13 en 2017 a 18 el pasado año 2018, dirigiéndose la demanda a países como India, Vietnam, Costa Rica, Rusia y Serbia.
En cuanto al número de menores adoptados, en el año 2018 se ha producido un descenso con respecto al año 2017, pasando de 27 menores en el año 2017 a 19 menores en el año 2018, siendo de los países que más niños han llegado India con ocho menores, Vietnam con cinco, China con tres y Filipinas, Republica Dominicana y Rusia con un menor respectivamente.
Por lo que respecta al sexo de los niños, este año han llegado seis niños y 13 niñas, y en cuanto a las edades, casi el 58 está entre los dos a cuatro años y otro 10,52 por ciento tienen menos de dos años.