Agentes de la Policía Municipal de Valladolid han sorprendido a un grupo de unas 20 personas, algunos de ellos menores, cuando celebraba una pelea clandestina de gallos en la calle en el barrio vallisoletano de Las Flores.

Los hechos se produjeron en torno a las 16.00 horas de este miércoles, cuando los agentes observaron a un grupo de unas 20 personas reunidas en la confluencia de las calles Gardenia y Flor. En esos momentos, uno de ellos, según relataron los policías, lanzó un gallo al aire con intención de azuzarle y, a continuación, hizo lo mismo un menor.

Los agentes se acercaron al grupo, interrumpieron la pelea de gallos, que en ese momento se encontraban encintados y con los espolones protegidos, e identificaron a los propietarios de las aves, que resultaron ser un padre y su hijo, así como un tercer varón que tenía un animal cogido y otros tres metidos en jaulas.

En total, los agentes observaron seis gallos vivos y un séptimo que estaba muerto en el suelo a unos 15 metros de distancia y con heridas visibles, por lo que posiblemente hubiera fallecido durante otra pelea. Además, se detectaron en la zona varias plumas por el suelo.

Los agentes realizaron una comparecencia para comunicar los hechos a la autoridad judicial y levantaron acta dirigida al departamento de la Junta de Castilla y León competente en salud animal.

Además, la Policía Municipal ha informado de que los hechos podrían ser constitutivos de delito leve, aunque los propietarios se han podido quedar con los gallos, a la espera de lo que se determine judicialmente.

Se trata del segundo caso de peleas clandestinas de gallos en la provincia de Valladolid en las últimas dos semanas, ya que el pasado 30 de junio la Guardia Civil detuvo a varias personas en Tordesillas cuando organizaban una actividad de este tipo en una nave.