Los trabajadores de las escuelas infantiles de la Junta de Castilla y León se concentran este viernes, 26 de julio, ante la Gerencia Regional de Servicios Sociales para pedir las 35 horas laborales, en contra de la imposición de calendarios y reclamar su dependencia de la Consejería de Educación y no de la de Familia e Igualdad de Oportunidades como ocurre ahora.
Así lo han explicado en rueda de prensa el secretario general de la Federación de empleados de Servicios Públicos (FeSP) de UGT en Castilla y León, Tomás Pérez Urueña, la secretaria del Sector de Administración Autonómica de la FeSP en León, Ruth Sanz, y la delegada del sindicato en escuelas infantiles en León, María José Barbero.
En concreto, los trabajadores, unos 400 de alrededor de 40 escuelas repartidas por las nueve provincias, tienen previsto concentrarse a las 12.30 horas de este viernes, primer día de vacaciones de los trabajadores de estas escuelas, que actualmente dependen de la Gerencia de Servicios Sociales.
Pérez Urueña ha criticado que las escuelas infantiles, a pesar de estar dentro del ciclo educativo, la Junta las considere como un servicio "asistencial" y, por ello, ha reivindicado que haya un cambio de competencias y dejen la Gerencia de Servicios Sociales para pasar a Educación.
De la misma forma, y al igual que lo piden con carácter general, ha reclamado la aplicación "real" de las 35 horas, algo que consideran más urgente en este caso.
Ruth Sanz ha señalado que los trabajadores se quieren hacer "ver y oír" para dar voz a sus reivindicaciones, que no son nuevas, y protestar por cuestiones como la "imposición" de calendarios, algo que no sólo afecta a las escuelas infantiles, sino que es un "sello" de la Gerencia y por ello ha reclamado retomar un "carácter dialogante" porque ahora sólo se beneficia a la Administración.
La responsable sindical ha reivindicado el carácter educativo del trabajo que se desarrolla en las escuelas infantiles y, para su "refuerzo", piden el cambio de dependencia de una consejería a otra, más aún cuando se les requiere una titulación técnica que tiene relación con la educación, pero además los niños que acuden a estas escuelas se rigen por normativa de este área y no por a de Familia, de la que sí dependen los trabajadores.
Ante estas situaciones, los trabajadores han presentado varias quejas al Procurador del Común, que ya ha anunciado que la tramitará, por lo que también en la concentración se recogerán firmas para apoyar lo que en ella se recoge, que tiene que ver con estas reivindicaciones.
Jornadas y días libres
En cuanto a los horarios y el calendario, tras reiterar la falta de negociación, Ruth Sanz ha señalado que los técnicos de escuelas infantiles tendrán 7,5 horas diarias, pero con la vuelta a las 35 horas lo que harán será generar 13 o 14 días libres que tendrán que coger de forma "concatenada", por ejemplo, con las vacaciones.
A este respecto, ha censurado que no se aseguren sustituciones ni en los días de permisos ni en las horas sindicales, cuando de lo que se está hablando es de niños de hasta tres años, con los que hay que tener "mil ojos" y cada responsable tiene 19 a su cargo.
Además, la "gota que colma el vaso", a juicio de Sanz, es que el resto de trabajadores de las escuelas (el responsable del centro, personal laboral o de cocina) pasen a trabajar siete horas y siete minutos, lo que supone un agravio comparativo y hay momentos en que se quedan trabajadores solos con la responsabilidad que supone. "No hay por dónde cogerlo", ha aseverado.
A pesar de ello, la Administración sigue "erre que erre", ha afirmado Ruth Sanz, quien ha destacado que los técnicos que trabajan en estas escuelas son la figura de "apego" a un niño de muy corta edad y, si falta durante un mes, va en contra de los beneficios de su educación, porque además en estas edades es cuando adquieren "hábitos básicos".
"Para la Administración las escuelas infantiles son sólo una herramienta de conciliación", ha agregado la responsables sindical, quien ha lamentado que no se tenga en cuenta esta conciliación con los trabajadores.
En la misma línea, ha criticado que a todos los partidos se les haya oído en campaña hablar del impulso a la educación infantil, pero parezca que sólo lo hagan en el ámbito "privado", con cantidades económicas previstas para ello, cuando la Junta tiene este tipo de centros en las nueve provincias. Así, ha abogado por mejorar y focalizar la educación infantil en las escuelas en "lo que tiene que ser", que un niño empiece a crear su propia personalidad, algo que a su juicio no se tiene en cuenta.
Ruth Sanz ha asegurado que hay comunidades autónomas que llevan mucha "ventaja" en el desarrollo de esta etapa educativa como Asturias, Andalucía y País Vasco, con más gente en las aulas, y ha invitado a los responsables políticos a que vean lo que es estar a cargo de ocho bebés o de 19 o 20 niños de hasta tres años, a lo que se suma que tienen también educación especial, que requiere más dedicación.
Finalmente, ha destacado que el trabajo que se realiza con los niños es muy importante porque es el inicio de sus estímulos y otras muchas cosas como ayudarles a quitar el pañal, un paso importante para niños y padres.