Castilla y León cuenta con más de 900 kilómetros de rutas históricas jacobeas que se suman a los 400 del Camino Francés, el más recorrido por los peregrinos que se dirigen a Santiago, y en el que desemboca la mayoría de estas vías.
De acuerdo con los datos oficiales consultados por Europa Press, el que recorre una mayor longitud dentro de la Comunidad es el de la Vía de la Plata, cuyo origen se encuentra en Sevilla y se incorpora a las tierras castellanoleonesas en Puerto de Béjar (Salamanca), una región que ya no abandona hasta concluir en la localidad leonesa de Astorga, después de transitar por 288 kilómetros.
A su paso por Zamora, el Camino se bifurca en una nueva ruta que atraviesa un centenar de kilómetros hasta internarse en tierras portuguesas para volver a cruzar la frontera española en Verín (Orense).
Sin embargo, dicha ruta no es la única que se escinde de la Vía de la Plata en su camino a Santiago, ya que en la localidad zamorana de Granja de Moreruela comienza el Camino Mozárabe-Sanabrés, que a través de casi 150 kilómetros cruza la provincia hasta abandonar Castilla y León y entrar en Galicia.
Camino de Bayona
Por otro lado, la única ruta que recorre la Comunidad con origen galo, junto con el Camino Francés, es el de Bayona, que parte de esta localidad francesa y finaliza en Burgos tras atravesar 98 kilómetros a lo largo de la provincia burgalesa, incluido el Condado de Treviño.
De la localidad cántabra de San Vicente de la Barquera parte la denominada ruta valdiniense, que discurre por la provincia leonesa junto al curso del río Esla durante 120 kilómetros, para después unirse al Camino Francés en Mansilla de las Mulas (León).
En León existe también otra ruta paralela a un cauce fluvial, en este caso al Bernesga, que comienza en la capital provincial y cruza al Principado de Asturias tras recorrer cerca de 60 kilómetros.
La particularidad de este camino reside en que no termina en la ruta francesa, como la mayoría, sino que parte de ella rumbo a Oviedo, a donde muchos peregrinos se aceraban en la Edad Media para contemplar las reliquias de la Cámara Santa de la Catedral.
Por último, de Santander parte el Camino del Besaya, que se funde con el ramal jacobeo francés en el municipio palentino de Carrión de los Condes después de transitar la provincia a lo largo de 107 kilómetros.
Rutas tradicionales
A parte de estos caminos históricos, existen en Castilla y León tres rutas tradicionales que atraviesan la Comunidad de sur a norte y que son el Camino de la Lana, que cruza las provincias de Soria y Burgos hasta incorporarse al Francés en la capital de esta última; el de Madrid, que une esta ciudad con Sahagún (León) a través de las provincias de Segovia, Valladolid y León, y el de Levante, que pasa por Ávila, Valladolid y Zamora.
Éste último se bifurca en Medina del Campo (Valladolid) en dos ramales que desembocan en la Vía de la Plata, uno en Benavente (Zamora) y el otro en la capital zamorana. Asimismo, existe una cuarta vía tradicional que atraviesa la comarca leonesa del Bierzo con el nombre de Camino Real de Invierno.