La Catedral de Palencia permite desde este miércoles visitar su proyecto de restauración a través de la exposición 'Descubriendo las obras' como otra forma de acercarse a este templo.

Las diversas actuaciones en la Seo palentina, cuyo importe total asciende a más de 2,2 millones de euros, se están desarrollando en espacios como el cuerpo central de la fachada occidental, las bóvedas de las naves interiores, en la Capilla de la Virgen Blanca, o el cuerpo superior de la torre, entre otros.

Estas intervenciones, como la realizada en 2017 por la Junta en la Capilla de la Inmaculada, en el marco del Proyecto Cultural 'La Bella Reconocida' --en alusión al sobrenombre de la basílica como 'La Bella Desconocida'--, responden a las estrategias de colaboración que lleva a cabo la Consejería de Cultura y Turismo para abordar intervenciones en los bienes culturales.

El consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, junto con el alcalde de Palencia, Mario Simón; el obispo la de Diócesis palentina, Manuel Herrero; la delegada del Gobierno en Castilla y León, Mercedes Martín, y el subdirector general del Instituto de Patrimonio Cultural de España, Javier Rivera, ha inaugurado la exposición 'Descubriendo las obras', organizada por la Diócesis de Palencia con motivo de la restauración que se está desarrollando en la Catedral de San Antolín.

La obra, cuyo presupuesto total supera los 2,2 millones de euros, cuenta con la financiación del Ministerio de Fomento, a través del Programa del 1,5 por ciento cultural por valor del 58,95 por ciento del total. La Junta de Castilla y León aporta el 25 por ciento y el resto la Diócesis de Palencia.

Las obras de restauración que está previsto finalicen antes del terminar este año 2019, abarcan la restauración del cuerpo central de la fachada occidental, para detener los procesos de deterioro que obligaron en 2016 a su cierre temporal y a la instalación de redes en su parte superior, como solución provisional para garantizar la seguridad de las personas, evitando el desprendimiento de fragmentos sobre la vía pública.

Bóvedas

Asimismo, se lleva a cabo la restauración del sistema de bóvedas en naves interiores, que permita recuperar para el espacio interior del monumento una lectura arquitectónica coherente, tanto espacial como histórica.

También se actúa sobre el cuerpo superior de la torre con el fin de conseguir la recuperación funcional del sistema de evacuación de aguas pluviales, cuyo mal funcionamiento ocasiona humedades generalizadas en el cuerpo de campanas y en las fábricas y elementos ornamentales de remate superior, así como sobre el cuerpo superior de la Capilla de la Virgen Blanca y su exterior.

Por último, se reubican los aseos al público, actualmente en la Capilla de Santa Lucía, fuera de los espacios de culto del conjunto catedralicio, y accesibles desde el claustro, que es el espacio habilitado para la recepción y acceso de visitantes al monumento.

En el marco de estas actuaciones y en paralelo al desarrollo de los trabajos, la Diócesis desarrolla un proyecto de difusión que estará abierto hasta el próximo 8 de diciembre. Se trata de una iniciativa que pretende complementar el programa de difusión vigente en el marco del Proyecto Cultural 'La Bella Reconocida', mediante la experiencia de ascender al nivel del claristorio de las naves principal y del crucero (a más de 20 metros de altura sobre el nivel de la nave).

De este modo, se aporta al visitante un punto de vista espacial inédito, que permite la observación cercana de las bóvedas, su trazado, aspectos constructivos, programa de acabados, procesos de deterioro, trabajos de restauración 'in situ' sobre arcos y plementerías, o trabajos de restauración de pinjantes decorativos policromados. Además, permite admirar, en el descenso, el impresionante retablo de la Capilla Mayor, con obras de, entre otros, Juan de Flandes, del que este año se celebra el 500 aniversario.

Como complemento a esta experiencia, se dispone la breve exposición 'Descubriendo las obras', que se instala en la panda norte del Claustro y que pretende acercar al visitante una visión general, amena y didáctica de los trabajos en ejecución. Dentro de ella se reserva un papel destacado a la observación de la Cátedra del Obispo.

Esta pieza singular es la más antigua de Castilla y León y un antecedente de los programas tipológicos en las sillerías corales góticas, realizada hacia el año 1415. Esto es posible ya que se encuentra temporalmente retirada de su emplazamiento en el coro, por razones de protección durante los trabajos.