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Juan Sánchez, un aficionado práctico, herido de gravedad en Íscar

4 agosto, 2019 13:42

Ocurrió ayer sábado en el coso cubierto de Iscar durante la capea de la mañana. Un toro alcanzó al aficionado práctico Juan Sánchez produciéndole una cornada en el gemelo con dos trayectorias.

Tras ser atendido por los servicios médicos de la plaza, fue trasladado al Hospital del Río Hortega de Valladolid donde fue intervenido. El herido pasó a planta donde se encuentra estable.

Juan Sánchez, albaceteño de 33 años de edad y residente en Arroyo de la Encomienda, es electricista de profesión, está casado y es padre de una niña. Este albaceteño es un aficionado práctico que suele acudir todos los años a los diferentes cursos que organizan diversos grupos para practicar el toreo de salón y ante las becerras. Su afición es desmedida y maneja las telas toreras con donaire.

La última vez que lo saludamos fue en un curso que organizó el diestro sevillano Dávila Miura el pasado mes de marzo. Sánchez colabora también con algunos ganaderos de la zona en tareas de tentaderos.

Acabamos de hablar con Juan Sánchez esta misma mañana y nos comentaba:  “me acaban de hacer la segunda cura, he pasado la noche con muchos dolores pero me están atendiendo muy bien.

“Es una herida profunda en el gemelo con trayectoria de entrada y salida, por eso se desgarró el gemelo. Me colgó y no me podía soltar hasta que rompió e hizo el desgarro”.

Sánchez nos relata cómo ocurrió: “Le di varios lances con el capote y el novillo obedecía perfectamente. Ya con la muleta le di el primero, pero en el segundo me cazó de mala forma y con mala suerte”.

El albaceteño es aficionado de toda la vida, pero en serio empezó hace unos catorce años como cortador, nos comentaba durante la conversación. Posteriormente se pasó al campo del aficionado práctico y a torear en las capeas. Hace dos años se puso delante, como se dice en el argot, de 47 toros, pero desde que nació su hija lo ha ido dejando. Es su segundo percance grave.

“Sabía que el novillo de Marcos Núñez no me lo iba a poner fácil -nos dice desde el lecho del dolor- y que no sería por dárselos. Me fui a por él y el primer muletazo lo tomó, pero el segundo, entre un fallo de colocación y de cite el novillo me vino por dentro y me echó mano”.

Pronta recuperación le deseamos desde estas líneas a nuestro paisano de Albacete. Que a buen seguro se pondrá de nuevo delante de los astados para satisfacer su afición.