Portillo ha vivido este domingo una jornada única y que quedará en el recuerdo de muchos. El municipio vallisoletano, engalanado con sus mejores vestimentas y lleno hasta la bandera, con calles abarrotadas de vecinos y turistas que han querido participar en las actividades, ha vivido el Día de la Patrona.
“Las Fiestas de Portillo son Patronales. Se llevan a cabo en honor de Santa María la Mayor y todas las actividades, tanto taurinas, como musicales, culturales e infantiles se organizan en torno a ese día. Un día en el que a la virgen se le saca en procesión por las calles del municipio y en el que el canto de La Salve, una vez finalizado el transcurrir, es el momento más emotivo”, nos confiesa el alcalde de la localidad vallisoletana, Juan Antonio Esteban Salamanca.
Pero antes de esa procesión, en esta mañana de domingo, se ha celebrado un pasacalles, a eso de las 10, que ha estado amenizado por una banda musical que ha acompañado a las autoridades y cofradías desde la Plaza de la Villa a la iglesia donde se ha celebrado la Misa en Honor de Santa María la Mayor. “Esta no es una misa cualquiera. La iglesia se viste de forma especial y el pueblo acude a esta cita con fervor y devoción”, nos contaba el primer edil, como se ha podido confirmar en un acto cargado de sentimiento y devoción.
Por la tarde, a eso de las 18 horas, se ha desarrollado la última novena y después la procesión en honor de Santa María la Mayor de Portillo, por las calles de uno de los municipios más bellos de la provincia, con un castillo que quita el sentido y ubicado en un alto para vislumbrar todas los bellos campos existentes alrededor de la localidad.
“La virgen recorre las calles de la villa desde las 18.30 horas hasta las 22.00 aproximadamente acompañada de vivas y jotas. En todo momento le siguen tanto la banda musical como un grupo de dulzaineros. Todo el pueblo y muchos visitantes acuden a esta cita tan importante marcada un año tras otro en nuestros calendarios”, aseguraba Juan Antonio Esteban Salamanca en declaraciones a NoticiasCyL.
La alegría y las jotas se han sucedido a lo largo de la tarde en torno a la virgen. También las sonrisas de los y las más experimentados del lugar y también de los pequeños que observaban ojipláticos el transcurrir de la virgen. Dentro de unos años comprenderán la importancia de la misma para el pueblo.
“Afronto estas fiestas con mucha responsabilidad pero también con ilusión. Son mis primeras fiestas como alcalde de Portillo y como portillano deseo que todo transcurra con normalidad. Que la gente disfrute, participe, respete y colabore. Que salgan a llenar la calle y a vivir cada momento de forma especial”, añadía el primer edil en declaraciones a este periódico.
Portillo cerrará su día grande con un pasacalles primero, desde la Plaza de la Villa, y con un encierro urbano y suelta de reses bravas en la Plaza de Toros para seguir viviendo días de diversión y muchas actividades dentro de un programa único, completo, con citas para grandes y pequeños, en unos festejos que finalizarán el próximo domingo día 15 de septiembre.