Escarda: “Nadie puede pensar que soy el hombre de Óscar Puente”
El próximo secretario general del PSOE de Valladolid, Manuel Escarda, ya proclamado oficialmente al ser el único candidato, ha mostrado su intención de incorporar a su equipo en el partido a personas "que se definen como críticas", con "distintas perspectivas y sensibilidades", siempre que "acaten la línea de trabajo".
En una entrevista concedida a Europa Press, el secretario provincial del PSOE, que será ratificado en el nuevo cargo en el Congreso Extraordinario del próximo 13 de octubre ya trabaja en numerosas reuniones por toda la provincia para preparar su equipo y presentar sus líneas de trabajo.
Escarda se ha definido como un "hombre de consenso", que puede "hablar y escuchar lo que haga falta" y al que considera que reconocen por su "talante". De hecho, ha afirmado que contará en su equipo con el grupo de militantes que "se definen como críticos", a quienes ha reconocido que trabajan "mucho, sobre todo en la provincia" y que hacen una labor "muy digna", a la que respeta.
El senador socialista por Valladolid quiere que en el partido estén "las cosas claras", que los militantes sepan que "el objetivo es el mismo para todos", por lo que ha incidido en que dará "la palabra" a todos, y confeccionará un equipo de trabajo que será su equipo, pero que "incorporará a distintas perspectivas y sensibilidades", siempre que "acaten la línea de trabajo", pues defiende que "tiene que haber una cohesión, no puede haber dos líderes".
Escarda ha reiterado su papel de "hombre de consenso, con talante de diálogo" e intención de "escuchar a todos", al tiempo que se ha situado en contra del "sectarismo" y ha advertido de que "decir que yo soy de tal grupo afín a uno u otro" ha generado "sufrimiento" y discusiones en el partido. De hecho, ha aseverado que solo reconoce dos corrientes: "Juventudes Socialistas e Izquierda Socialista".
También ha argumentado que en las últimas semanas ha habido un precandidato, Luis Miguel Ramos, que ha renunciado, mientras que hubo "otros grupos críticos" que realizaron reuniones y plantearon propuestas pero al final no se han presentado. "Eso da idea de que me ven como una persona a la que reconocen por mi talante, escuchar y hablar lo que haga falta", ha explicado.
La sociedad, por delante del partido
El próximo secretario general del PSOE de Valladolid ha incidido en que otro de sus objetivos es que los problemas del partido "nunca se tienen que anteponer a los de la sociedad", y se considera indicado no solo para mejorar el partido, sino para que pueda "ayudar a los que lo necesitan", algo que es, a su juicio, "la principal finalidad de un partido progresista".
En definitiva, ha reiterado que se debe acabar con "aquellas riñas que se han vivido en la Ejecutiva" en otras etapas, con "discusiones estériles, broncas o filtraciones a la prensa".
Además, Escarda ha apuntado que en la Ejecutiva se incorporará "a gente de la ciudad", ya que hasta ahora considera que había "menos" representación. Eso sí, ha recordado que en Valladolid capital hay una Comisión Ejecutiva Municipal cuyo ámbito es la ciudad, pero ha incidido en que debe haber "buena conexión" entre el alcalde de la capital, Óscar Puente, el portavoz en la Diputación y él mismo.
"Prevenir los fuegos, no dedicarse a apagarlos"
"Hay que prevenir situaciones como la que se ha dado, el conflicto puntual que ha surgido. No nos tenemos que dedicar a apagar fuegos, sino a prevenirlos", ha enfatizado.
Al respecto de Óscar Puente, Escarda ha enfatizado que "nadie que conozca el partido, ni los militantes" dirán que ha sido el regidor vallisoletano y portavoz de la Ejecutiva federal quien le ha situado en el cargo, aunque ha reconocido que le ha "empujado" a presentarse como candidato, pero al igual que lo han hecho el miembro de la ejecutiva federal Javier Izquierdo, el actual subdelegado del Gobierno, Emilio Álvarez Villazán; o el actual miembro de la provincial, Leandro Martín.
"Nadie puede pensar que soy el hombre de Óscar Puente", ha insistido Escarda, que ha garantizado que el alcalde "no se va a inmiscuir" ya que considera que él gestiona el Ayuntamiento, con lo que "ya tiene bastante" y su secretario de Organización gestiona la ejecutiva municipal, mientras que Escarda y su equipo gestionarán la provincial.
El ya confirmado secretario provincial ha considerado también que "la paz" en el partido "ya está hecha" y que aunque se percibe "algo de disensión", hay "armonía", e incluso ha incidido en que "el 95 o el 99 por ciento de los militantes ven que esa armonía es necesaria".
Portavoz de la Diputación
Una de las primeras decisiones que tomará "muy pronto", ha comprometido Escarda, será la designación del portavoz del Grupo Socialista en la Diputación provincial, algo que "corre prisa" pues los diputados "lo piden a gritos" para que haya "un portavoz, un viceportavoz y empezar a trabajar".
A este respecto, ha apuntado que tiene "ideas" pero ha preferido esperar a hablar con todos los diputados y posteriormente tomar una decisión.
A partir de ahí, elecciones mediante, el equipo que liderará Escarda, también buscar trabajar en los pueblos "donde hay agrupaciones y donde las hay", por lo que ha garantizado que él mismo, el nuevo secretario de Organización y los diputados provinciales irán "allí donde haga falta, de forma periódica con reuniones" y, por otro lado, cuando surja una denuncia o necesidad.
Para ello también se contará con una Oficina parlamentaria virtual, que dependerá de la Secretaría de Política Institucional, que estará compuesta por todos los diputados provinciales y nacionales, los senadores y los procuradores socialistas de la provincia, para estar coordinados "de tal manera que cuando surja una necesidad, poder canalizarla".
También propone llevar actividades del partido a los pueblos, pero no solo para dar información a los militantes, sino a la gente de los pueblos, "serles útiles".
Pero antes de desarrollar ese trabajo del día a día, el nuevo secretario provincial tendrá que afrontar, menos de un mes después del inicio de su mandato, las elecciones generales del 10 de noviembre. Para ellas, ha confirmado que el partido mantendrá como responsable del Comité de Campaña al secretario de Organización de la Ejecutiva saliente, Pedro Pablo Santamaría.
Sobre ese proceso electoral, Escarda ha apostado por que el PSOE "al menos puede mantener los resultados" de las elecciones generales del pasado mes de abril en Valladolid. "En el voto de derechas puede haber cambios por el juego entre las tres formaciones, en la izquierda va a haber menos variabilidad", ha apuntado.
Eso sí, ha considerado importante "dar la vuelta" a la sensación de "desánimo" que hay actualmente en la sociedad, algo que considera que "va a cambiar" en estas semanas y que contribuirá a que la participación se mantenga alta. "Tampoco me parece que sea un abuso indicar a los ciudadanos que no queda otro remedio que votar", ha defendido Escarda, que ha matizado que el sufragio "es un derecho, no una obligación".
En todo caso, ha mostrado su confianza en que el próximo gobierno sea "socialista, monocolor y estable, por el bien del país", después de un verano en el que considera que la posición del equipo de Pedro Sánchez fue "clara" y después de la investidura y del rechazo de Podemos a la oferta de gobierno "no se podía retomar dos meses después lo que ya se había rechazado".