Tras llegar el fin de semana pasado, en la IX entrega del ‘Caminando por la provincia de Valladolid | ¿En qué pueblo estamos?’,  hasta Serrada para disfrutar del mejor vino, este domingo nos desplazamos hasta un municipio que ha vivido hace pocas semanas sus Fiestas Patronales de Nuestra Señora del Rosario en una simbiosis perfecta entre las más diversas actividades que se han transformado en alegría y diversión con la música, las peñas y los toros como protagonistas principales.

Mojados es una localidad que está situada en plena Tierra de Pinares, cuenta con una superficie de algo más de 46 kilómetros cuadrados y con 3.252 habitantes haciendo caso al padrón del año 2018. Está situado a 25 kilómetros de la capital y llegamos hasta allí después de recorrer una larga recta de 8 kilómetros desde Boecillo, en dirección Madrid.

“Mojados es cruzado por el río Cega. Tenemos la suerte de contar con un puente de seis arcos de piedra, que fue construido por Juan de Nates en 1.575 cuando gobernaba Felipe II. Nuestra localidad tiene el privilegio de contar con una gran historia y con la figura de Carlos V, del que celebramos su visita en el mes de julio”, nos confiesa el alcalde Adolfo López, con el que nos embarcamos en otra bonita aventura para conocer su pueblo.

Una historia y un patrimonio de quilates

“Nuestro municipio cuenta con dos iglesias preciosas que son únicas por la forma en la que se han construido. Se construyeron mezclando ladrillo y mampostería y aunque parezcan iguales o similares ofrecen valores, en lo artístico, muy diferentes. Me estoy refiriendo a la Iglesia de San Juan y a la de Santa María”, nos cuenta orgulloso el primer edil.

La Iglesia de San Juan es mudéjar, de los siglos XIII y XIV. Cuenta con una nave con bóveda de cañón apuntado y fajones y un crucero con bóveda de arista además de una capilla mayor con bóveda de horno destacando su preciosa torre y la portada en la que podemos deleitarnos con un arco de herradura apuntado.

Muy cerca de la vereda del río Cega se ubica la otra iglesia que reina en la localidad pucelana, la de Santa María. Esta es de estilo mudejar, como la anterior, y del S.XIV. Cuenta con una mayor amplitud  y con tres naves y, además de la torre, a destacar, llama mucho la atención una bella portada con arquivolta apuntada.

Además de las dos iglesias, de “un pueblo de origen medieval” del que se tiene constancia ya “durante la Reconquista” momento en el que se habló del pueblo “cuando se atravesó el Duero”, destacan otros lugares de importancia que merece la pena visitar como el Ayuntamiento, la Casa del Conde de la Patilla o la Ermita de Nuestra Señora de Luguillas, de mampostería, con espadaña de piedra y ladrillo, de estilo barroco, y realizada a lo largo del siglo XVII con una nave entre contrafuertes cubierta con bóveda de cañón con lunetos.

A destacar también el Museo Carlos V, el primero en España dedicado al monarca y en el que encontramos todo lo referente a su persona.

Fiestas y la importacia de Carlos V

“El día 8 de septiembre se realiza una romería en Mojados. A esta festividad tenemos que unir la dedicada a la Virgen del Rosario, que es la considerada como fiesta grande del pueblo y que se desarrolla del 4 al 8 de octubre celebrándose todo tipo de actos culturales, religiosos y taurinos teniendo además los encierros y las corridas de toros un lugar destacado”, añade Adolfo López, alcalde del municipio.

La diversión máxima se vivió hace apenas unos días en la localidad pucelana con esas Fiestas de Nuestra Señora del Rosario con un completo programa que alternaba verbenas, con chupinazos, encierros y Concursos de Cortes como el ‘Villa de Mojados’ que se acabó llevando el cortador Dany Alonso.

“También es muy especial la Navidad, con su cabalgata, el Carnaval, donde la celebración se alarga una semana más de lo normal, la Romería a Luguillas, por San Marcos el 23 de abril, además de recreación histórica de la llegada de Carlos V que se celebra el primer fin de semana de julio”, añade el primer edil.

 En ese momento mágico en el que el municipio vuelve al pasado se recrea la visita de Carlos V que se encontró con su hermano Fernando en un momento cumbre ya que le reconoció como rey de Castilla  para ser posteriormente Emperador. La importancia del monarca es tal en la villa que toda ella se engalana durante días mágicos con ropas antiguas para celebrar tan importante momento histórico.

Una gastronomía de la de siempre

“En lo que a la gastronomía se refiere, cuando se visita nuestro pueblo, uno puede deleitarse con el lechazo y las carnes a la brasa en los distintos restaurantes de calidad que tenemos en Mojados en un momento único y para chuparse los dedos”, nos cuenta el alcalde.

Además, las pastas de piñón, los quesos artesanales y las cremas de queso de diversos sabores de Quesos Muñiz invitan a darse una vuelta por el placer que es comer. Desde el Consistorio de Mojados también hacen mención a los postres de Le Boutique. Uno de ellos, casualmente, se convirtió, hace unos meses, en el ganador del mejor postre de la provincia con una tartaleta azucarada rellena de crema de almendra con compota de manzana y crumble coronado con avellanas y almendras.

El vino blanco de la zona es un perfecto acompañante para disfrutar de otro de los municipios mágicos de una bellísima provincia de Valladolid que recorremos domingo a domingo.

Caminando por la provincia de Valladolid | ¿En qué pueblo estamos?