El Salamanca UDS ha salido al paso de una polémica surgida en la tarde de este domingo en el partido que el primer equipo del club jugó frente al Alavés B.

En un momento del partido, la seguridad del estadio se llevó a un aficionado del fondo sur y acto seguido, parte de la grada de animación que se encuentra en la zona, decidió abandonar el recinto.

Sobre ello, el club ha anunciado que los vigilantes de seguridad identificaron a un seguidor en "evidente estado de embriaguez y le invitaron a salir del recinto" ya que en la Ley contra la Violencia en el Deporte viene recogida la prohibición de ello.

Sin embargo, miembros de la misma peña a la que pertenecía este aficionado decidieron acompañarle al no "acatar una decisión que viene recogido en la vigente Ley contra la Violencia en el Deporte".

De hecho, el club insiste en que "no permitirá a ningún espectador alterar el orden público y respaldará todas y cada una de las decisiones que, tanto Seguridad Privada como Guardia Civil adopten de cara al correcto desarrollo de los eventos deportivos que se celebren en el Estadio Helmántico".