El jefe provincial de Tráfico de Salamanca, Miguel Moreno, anunció este lunes en el minuto de silencio por el 'Día Mundial en Memoria de las Víctimas de Accidentes de Tráfico', un nuevo radar en las carreteras de la provincia "antes de final de año" cuya ubicación todavía no se ha determinado.
El objetivo de este, dijo, es seguir reduciendo los accidentes de tráfico mortales, que este año mantiene un número similar al del año pasado en la provincia con la excepción de la gravedad de estos, especialmente en los ocurridos en Lunes de Aguas y el de Galisancho. Por ello, puso en valor el descenso de fallecidos con respecto a hace años, cuando se superaban los 30 por los 13 en carreteras interurbanas este año.
De hecho, a nivel estatal, el número de fallecidos hasta la fecha es de un centenar menos con respecto al año pasado, aunque puso el foco en seguir haciendo bajar estas cifras, casi todas culpa del ser humano. Y es que más de un 70% de estas se dan por distracciones, exceso de velocidad y el alcohol.
Además, anunció una nueva ley que abarque los nuevos retos actuales como el uso del teléfono móvil o la mortalidad en los sector más "vulnerables" como es el caso de peatones, ciclistas y motoristas. De hecho, cuatro de cada cinco fallecidos en ciudad se trataba de estos por lo que se reducirá la velocidad a 30 kilómetros por hora, como ya se había anunciado.