Demasiado evidente el problema político que vive esta Comunidad castellano y leonesa con sus representantes hablando más de lo de allá lejos que de los problemas que vive Castilla y León. El control al Ejecutivo ha tenido poco de sustancia propia y mucho de problemas de otras comunidades. De pactos en Madrid y sentencias en Andalucía y, lo más preocupante, sin parada en Valladolid.
Luis Tudanda entró en el debate con la problemática de la mujer, con sus salarios y sus paradas, con la violencia de género y el arraigado machismo. En su réplica, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, desvió ya todo el fundamento del pleno hacia la sentencia de los ERE en Andalucía. Un asunto que tuvo su mayor punto álgido en la contestación que el presidente de la Junta dio al procurador de Podemos Pablo Fernández, quien, en ningún momento habló de este asunto y sí, mucho, del vicepresidente Francisco Igea que reía a unos y a otros. Así, Fernández advirtió que la "carrera enloquecida" de Igea por "cambiar sillones" puede llevar al vicepresidente de la Junta "a vender Castilla y León por 700 cabezas de ganado y por cien doncellas". Además, Fernández ha comparado al presidente y al vicepresidente con los "Epi y Blas de la Meseta" y con "Rinconete y Cortadillo" por su relación de "amor sin sexo" fruto de una "imposición" del PP para, "como señores feudales", seguir gobernando para que no se levantasen las alfombras tras 32 años de gobierno en la Comunidad Autónoma.
Por su parte, Fernández Mañueco, sin entrar en el fondo de la cuestión plateada por el procurador del Grupo Mixto, se desvió por la autopista hacia Madrid, al situar a Pablo Iglesias, en el 5 por ciento de la "casta que va a poder dormir a pierna suelta" cuando fructifique un Ejecutivo conjunto que se va a sustentar, según ha augurado, con Otegi o con Rufián, a los que ha acusado a su vez de querer romper España. Algo que no pasó desapercibido para el procurador socialista González Reglero al recordar también al a bancada popular los acuerdos de Otegi con Maroto, ahora senador autonómico por Castilla y León de la que depende Treviño, es que las hemerotecas, ay!
Pero Andalucía no quedó solo ahí, sino que el consejero de Presidencia, Ángel Ibáñez, no dudó en sacar fotocopias de fotos realizadas atrás en el tiempo con Zarrías y Chaves. Pero, en el fondo, no sabemos si Pablo Fernández dormirá bien o no, lo cierto es que pensará mucho en las preguntas que nunca fueron respondidas por el presidente Mañueco, más allá del tono "histriónico" que dice el presidente utiliza el podemita. Por cierto, duro el presidente de las Cortes, Luis Fuentes, quien avisó a Fernández por una vez y no permitió que se dirigiera al presidente de la Junta cuando se fue por peteneras sin entrar en el fondo de las preguntas del procurador por León.
La sentencia de los ERE, con varios dirigentes socialistas andaluces condenados, ojo, que no el PSOE-A, sino antiguos responsables públicos de la Junta de Andalucía, fue la estrella de la sesión. Debemos tener presente, que en esa España donde todo valía, tanto en unas comunidades como en otras y en el Gobierno central, el caso ERE supuso un fraude multimillonario muy superior al del proceso que condenó al PP en Madrid, pero no hay blanqueo, ni financiación ilegal del PSOE. Veamos, en el caso Gürtel, el tribunal consideró probado que una parte del dinero ganado por la trama corrupta gracias a las adjudicaciones irregulares de contratos se utilizó para financiar actos electorales del PP y, por tanto, se financió ilegalmente a esta formación política. En el caso ERE, la investigación de otras ayudas para empresas en dificultades descubrió un trato de favor a determinadas zonas, como la Sierra Norte sevillana, con Gobiernos del PSOE o a empresas propiedad de exdirigentes socialistas. En la causa no consta que los delitos cometidos permitieran la financiación ilegal del PSOE, a pesar de que la primera instructora, Mercedes Alaya, lo plasmó sin pruebas en sus autos.
Más allá de sentencias y culpabilidades, lo cierto y constatado en la sesión de control de esta tarde en las Cortes de Castilla y León, es que el caso ERE le ha venido como agua en mayo al PP y al gobierno Mañueco para desviar toda la atención del control político de su gestión hacia Andalucía. Unos y otros, y los de más allá del Gobierno regional, buscaban cualquier atisbo para sacar a relucir los ERE. Ya se sabe en estos casos que hablan del pasado y de todos aquellos que tuvieron funciones de poder político en años locos, de dinero fácil y de mirar para otro lado en las necesidades de los ciudadanos, si escupes para arriba... ay!
Y, para finalizar, visto lo acontecido en todos estos años de locura, España ha cambiado mucho para bien y, a buen seguro, que no se permitirá más casos de corrupción que, tenerlos, los hemos tenido muy cerca y aún están en los tribunales. Por ello, menos reproches entre unos y otros -todos tienen que callar- y menos risas desde la bancada azul, y garanticemos la limpieza de las instituciones, casi siempre financieras de amigos, listos, pillos y corruptos. Aunque Mañueco duerma bien porque Igea cree en España y en los españoles.
Esta España nuestra, ay!