Es en época romana al lado de la mal llamada Vía Trajana cuando surge el asentamiento de Sahagún. Entre los siglos II y III la tradición hagiográfica sitúa el martirio de los Santos Facundo y Primitivo, que tras una terrible tortura morirán decapitados. Arrojados sus cuerpos a las aguas del río Cea, serán recogidos por otros cristianos para darles sepultura, su tumba se convertirá en santuario venerado por ésta y otras comarcas cercanas. Surgirá una próspera comunidad en torno a un monasterio que acumulará un patrimonio considerable. Será Alfonso VI (1065-1109) su gran benefactor y con él vivirá una época de gran esplendor con la concesión de su fuero en el año 1085, uno de los más antiguos de España. El responsable de la apertura hacia Europa, de la reforma cluniacense, de la implantación del rito romano y del impulso de la Ruta Jacobea, encontró descanso eterno en la villa de Sahagún, por deseo que dejó testamentado.
En la Alta Edad Media el Monasterio de San Benito será uno de los más importantes de la Hispania, llegando a depender de él más de noventa cenobios. En él se sucederán hechos históricos importantes, entre otros, ser sede en 1158 de la firma del Tratado de Sahagún.
Pero el siglo XIX trajo cambios a Sahagún, desaparecerá el antiquísimo monasterio y con él la hegemonía del poder laico. La Guerra de la Independencia supuso el saqueo de la abadía de San Benito y del convento de San Francisco. Los destrozos a manos de los franceses e ingleses fueron numerosos, además del terrible incendio que asoló la abadía en 1835. La posterior restauración fue efímera, llegando su final tras las desamortizaciones de Mendizábal de 1836.
Consecuencia de su historia, de sus culturas mezcladas (cristianos, judíos y árabes), del entorno y materiales, de su situación en el Camino de Santiago Francés, etapa séptima según el Codex Calixtinus, es su patrimonio, su arte mudéjar, referencia del que posteriormente se realiza en otros lugares. Estos edificios en su mayoría fueron declarados Monumento Histórico artístico en el año 1931.
En la actualidad cuenta con cinco monumentos declarados BIC; San Tirso, San Lorenzo, La iglesia de la Virgen Peregrina, Restos del Monasterio de San Benito y Arco, y Monasterio de San Pedro de Las Dueñas, además de la villa que está incoada a Conjunto Histórico. Otros templos de gran valor arquitectónico son San Juan, La Ermita del Puente y La Trinidad, a sumar las pequeñas iglesias de las pedanías que guardan tesoros de incalculable valor como el retablo renacentista de Joara.
No podemos olvidarnos de los personajes relevantes que ha dado la villa, San Juan de Sahagún (1430-1479 ) Santo patrono de la villa, pacificador de Salamanca, a él se le atribuyen más de cien milagros; Fray Bernardino de Sahagún ( 1499-1590) monje franciscano autor del Códice Matritense y Códice Florentino, su obra fue Declarada por la UNESCO en 2015 Memoria del Mundo; Fray Pedro Ponce (1508-1584) precursor del lenguaje de sordomudos; Fernando de Castro Pajares (1814-1874) no sólo doctor en Teología, Académico de la Real Historia y liberal preocupado por los desheredados y la abolición de la esclavitud, sino que especialmente interesado y defensor de la igualdad de la mujer y su educación o Juan Crisóstomo Torbado Flórez(1867-1947) natural de Galleguillos de Campos, Arquitecto restaurador de la Catedral de León, entre otros.
Sahagún, villa histórica de la provincia de León (España), centro geográfico del Camino de Santiago francés, final del Camino de Madrid y del Camino Lebaniego, cuna del mudéjar, descanso eterno de reyes…