El secretario general del PSOECyL, Luis Tudanca, ha asegurado que quiere gobernar, pero "no a cualquier precio" ya que no está dispuesto a "vender su alma, cambiar cromos, vender las instituciones ni traicionar" su palabra.

En una entrevista que publica este domingo El Norte de Castilla, Tudanca también acusa al presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, como al vicepresidente y portavoz de la institución, Francisco Igea, de utilizarle para "lavar su conciencia", algo que no está dispuesto a aceptar.

"Yo no les obligué a pactar. Sí les digo algo: no seré como ellos. No gobernaré a cualquier precio. No lo haré", asevera Tudanca, que también critica que "ellos hicieron lo que les mandaron" mientras que él llegó incluso a apartarse a un lado porque no quería ser presidente a cualquier precio, una estrategia con la pretendía "desnudar la falsedad y la hipocresía de unos argumentos surrealistas" porque le acusaban de ser "demasiado sanchista". "Si el problema era yo, estaba dispuesto a apartarme para que hubiese un gobierno socialista que cambiara las cosas", agrega.

Precisamente, de esta actitud se han servido Mañueco e Igea para acusarle de estar "empeñado" en no gobernar: "Me hace mucha gracia que ellos, que perdieron las elecciones, que incumplieron el mantra de respetar la lista más votada, intenten usarme para lavar su conciencia".

Además, confiesa que ahora, le parece "irrelevante" lo que diga cualquiera de Ciudadanos (Cs) y que considera que Fernández Mañueco, como presidente de la Comunidad, "es el responsable de lo que sucede en Castilla y León". "Él es el presidente y el que permite que se hable de fusión de municipios, que se ponga en marcha un proyecto piloto en la sanidad rural para cerrar los consultorios médicos, el circo que se ha montado con las Edades del Hombre y que la corrupción siga campando a sus anchas", lamenta.

Del mismo modo, acusa a Fernández Mañueco de no querer dialogar "salvo con las dos derechas para repartirse los puestecitos", al tiempo que "pretende ocultar su radicalidad e incapacidad culpabilizando a la oposición". "Si no quiere gobernar, que se eche a un lado", ha incidido.

En este sentido, ha recordado el gobierno de Juan Vicente Herrera, predecesor en el cargo de Fernández Mañueco: "No me gusta ninguno. Yo prefiero un proyecto socialista. Pero sí veo una diferencia fundamental: aquel gobierno, aquel PP, tenía palabra".

Clave nacional

En lo que respecta al ámbito nacional, Tudanca ha extrapolado la situación en Castilla y León al Congreso: "Si no hubo gobierno tras el 28-A es porque PP y Cs decidieron que estaban más cerca de Vox que del PSOE y que no harían nada parta facilitarlo. Ahora están en la misma tesitura histórica: son ellos los que han rechazado cualquier posibilidad de interlocución".

Sobre el caso de los ERE, Tudanca ha aseverado que "la sentencia se respeta" ya que se trata de un asunto de "extrema gravedad" y "no se puede ser tibio". "Desde el punto de vista personal, ojalá prosperen los recursos en el Supremo" ya que "sería bueno para loas afectados y también para la política si se demuestra que esos hechos no son como refleja ahora la sentencia".

No obstante, este caso, al que Tudanca no restará "ni un ápice de gravedad", no habla, según ha explicado, de "enriquecimiento de los implicados, ni de responsabilidad del partido, ni considera que haya financiación irregular".