La Guardia Civil, en el marco de la operación 'Tangerina', ha desmantelado en Miranda de Ebro (Burgos) un taller clandestino para la fabricación de artefactos explosivos improvisados. Se trata de una de las mayores incautaciones de este tipo de artefactos de fabricación artesanal realizada hasta el momento en nuestro país.
Los agentes han detenido a una persona a la que se le imputan los supuestos delitos de tráfico de armas, depósito de armas de guerra, depósito de armas, depósito de municiones y depósito de explosivos, según informaron a Europa Press fuentes del Instituto Armado.
El ahora detenido tenía instalado en su domicilio un taller clandestino dotado de todo tipo de maquinaria para la fabricación de artefactos explosivos improvisados, así como para la manipulación de armas de fuego y la fabricación artesanal de munición para las mismas.
Se han intervenido 17 de estos artefactos, ya montados y cargados, muchos de los cuales los había ocultado en un garaje comunitario.
Asimismo, se han incautado más de 30 kilos de distintas sustancias químicas precursoras de explosivos y material de laboratorio (probetas, matraces, recipientes de precipitación, etc.) utilizados para la fabricación de los mismos.
Igualmente, esta persona adquiría en países del Este de Europa armas de fuego deficientemente inutilizadas, muchas de ellas de guerra (fusiles de asalto y subfusiles), que posteriormente manipulaba para ponerlas de nuevo en condiciones de disparar y efectuar fuego real.
Dichas armas eran introducidas ilegalmente en el país a través de paquetes postales, por lo que al no estar registradas en las bases de datos nacionales podían ser desviadas al mercado ilegal o empleadas en actos delictivos con total impunidad.
Dada la condición de armas de guerra de algunas de ellas, tanto por su calibre como por su capacidad para hacer fuego automático (ametrallador), la reactivación de este tipo de armas y su posesión ilegal suponen un grave riesgo para la seguridad ciudadana.
Esta operación se enmarca dentro del Plan Integral para el Control de las Armas de Fuego (PICAF) de la Guardia Civil que, al ser el Cuerpo que a nivel nacional tiene encomendada en exclusiva la competencia sobre el control de las armas y explosivos, ejerce un control exhaustivo sobre las mismas, haciendo un seguimiento muy estrecho de este tipo de conductas ilegales.
Con esta intervención se ha impedido no sólo que el elevado número de artefactos explosivos y armas incautadas pudieran ser empleados en hechos violentos o desviados al mercado negro, sino también el riesgo para los vecinos de los lugares donde los almacenaba el detenido en caso de una explosión accidental durante su fabricación y manipulación.
El detenido ha sido puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Miranda de Ebro (Burgos).