La Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León ha publicado en su portal de Gobierno Abierto las bases que regularán las próximas convocatorias de ayudas a operadores para la mejora de la cobertura de banda ancha.
Según ha informado el Ejecutivo autonómico a través de un comunicado, la conectividad mediante banda ancha de alta velocidad reviste una "importancia estratégica" para la modernización y la transformación digital de la Comunidad, promoviendo el crecimiento y la innovación en todos los sectores de la economía, la cohesión social y territorial, permitiendo mejorar la competitividad de las empresas y la calidad de los empleos que se ofertan al mercado laboral, con una componente indudable de desarrollo rural y de compromiso con la satisfacción de las necesidades básicas de la ciudadanía, como ahora es la conectividad.
La Junta de Castilla y León y la Administración General del Estado han concedido entre los años 2015 y 2019 cerca de 57 millones de euros de subvención a proyectos que, sumados a una financiación de más de 31 millones aportados por los operadores de telecomunicaciones, han sido 88 millones de euros que están llevando la posibilidad de acceder a Internet de forma rápida y fiable a 650.000 ciudadanos más de 1.481 localidades del medio rural de la Comunidad.
A pesar de estas inversiones, en Castilla y León continúa habiendo poblaciones que siguen siendo consideradas como "zona blanca", es decir, en las que "no hay redes de acceso a Internet de alta velocidad ni está prevista su implantación en los próximos tres años".
Por este motivo, la Junta de Castilla y León incrementará durante esta legislatura el esfuerzo inversor dedicado a continuar reduciendo el número de zonas blancas existente, buscando la colaboración con el resto de las administraciones públicas y de los operadores de telecomunicaciones.
La publicación en la web de Gobierno Abierto de las bases reguladoras que regirán las próximas convocatorias de ayudas a operadores, para someterlas a la audiencia pública, es el primer trámite necesario para la convocatoria de estas nuevas líneas de ayudas que permitirán continuar mejorando el acceso a Internet en el medio rural de Castilla y León. La primera convocatoria al amparo de estas bases reguladoras contará con una dotación de al menos diez millones de euros.